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Alta exposición a pornografía entre jóvenes australianos alimenta la violencia contra las mujeres

Las estrategias de salud pública entre los jóvenes deben abordar la violencia contra las mujeres y las prácticas sexuales de riesgo asociadas con la exposición a la pornografía, afirman investigadores de la Universidad Tecnológica de Queensland en una nueva investigación.

Los investigadores de la Escuela de Justicia QUT, el profesor Michael Flood y Ph.D. Las candidatas Maree Crabbe y Kelsey Adams se basaron en una encuesta representativa a nivel nacional de 1.985 australianos de entre 15 y 20 años sobre su exposición y uso de la pornografía.

Han publicado sus hallazgos en la Revista de Salud Pública de Australia y Nueva Zelanda.

La encuesta fue realizada por Our Watch, líder nacional en el trabajo de Australia para detener la violencia contra las mujeres y sus hijos antes de que comience.

Crabbe dijo que un creciente conjunto de evidencia indicaba que la exposición y el uso de la pornografía entre los jóvenes tenía implicaciones para la salud pública.

«En particular, la pornografía juega un papel en la configuración de la comprensión, las expectativas y las experiencias sexuales de los jóvenes», dijo la Sra. Crabbe.

«Las investigaciones han demostrado que la pornografía está asociada con una variedad de actitudes y comportamientos dañinos, incluidos comportamientos sexuales riesgosos, una mayor cosificación sexual de las mujeres, la aceptación del mito de la violación y la coerción y agresión sexual. Este estudio tuvo como objetivo proporcionar una investigación rigurosa a gran escala que examine «La exposición de los jóvenes a la pornografía incluye diferencias demográficas y geográficas en todo el país».

Crabbe dijo que la encuesta mostró que la pornografía tenía una presencia generalizada en la vida de los jóvenes en Australia.

«En esta encuesta realizada a jóvenes de 15 a 20 años, el 86 por ciento de los hombres y el 69 por ciento de las mujeres habían visto pornografía. De ellos, el 50,1 por ciento de los hombres jóvenes y el 40,3 por ciento de las mujeres jóvenes informaron haber buscado deliberadamente pornografía la primera vez que la vieron. «.

La curiosidad fue citada como la principal motivación para buscar pornografía por primera vez, seguida de la estimulación sexual, porque los amigos estaban mirando y queriendo aprender más sobre sexo.

«Entre los jóvenes que habían visto pornografía, la edad promedio de la primera exposición a la pornografía fue de 13,2 años para los hombres y 14,1 años para las mujeres», dijo la Sra. Crabbe.

El profesor Michael Flood dijo que el alcance de la exposición a la pornografía que reveló el estudio hacía probable que la pornografía tuviera una influencia significativa en las actitudes y comportamientos sexuales de los jóvenes australianos.

«El uso de pornografía está asociado tanto con la perpetración de violencia como con la victimización. Dado que los hombres jóvenes de entre 15 y 19 años son el grupo con mayor probabilidad de perpetrar violencia sexual, y las mujeres jóvenes de ese grupo de edad tienen más probabilidades de ser víctimas de ella, la prevención de la violencia debe incluir esfuerzos para reducir los daños potenciales de la pornografía», afirmó el profesor Flood.

«Casi la mitad de los jóvenes que encontraron pornografía por primera vez lo encontraron accidentalmente en línea a través de búsquedas o ventanas emergentes, lo que sugiere que se deben considerar medidas tanto regulatorias como tecnológicas para limitar la exposición en línea de los menores».

Patty Kinnersly, directora ejecutiva de Our Watch, dijo que la investigación dejaba claro que los jóvenes necesitaban más apoyo.

«Los jóvenes necesitan ayuda para pensar críticamente sobre la representación de los roles y relaciones de género en la pornografía, así como los posibles impactos en sus propias vidas», dijo la Sra. Kinnersly. «Los jóvenes necesitan orientación, conversaciones honestas e información sobre sexo, relaciones sexuales y pornografía para desarrollar relaciones igualitarias, positivas y saludables».

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