AMLO concluye su sexenio: logros, pendientes y el futuro de la Cuarta Transformación
Este 30 de septiembre, Andrés Manuel López Obrador culmina su mandato presidencial para dar paso a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum como la primera mujer presidenta de México el 1 de octubre.
La transición no solo marca el cierre de un sexenio, sino el inicio de un nuevo capítulo en la historia del país. A lo largo de estos seis años, López Obrador promovió cambios estructurales significativos, aunque también deja asuntos pendientes que serán un reto para la nueva administración.
Infraestructura y programas sociales: los grandes pilares
El sexenio de AMLO será recordado por las grandes obras de infraestructura y el impulso de los programas sociales. Entre las obras emblema destacan el Tren Maya, la refinería Dos Bocas y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), proyectos que López Obrador considera parte de su legado. En cuanto a los programas sociales, el aumento del salario mínimo y el fortalecimiento de las ayudas para adultos mayores fueron algunas de las políticas más aplaudidas por su base de seguidores.
“El mayor logro fue el crecimiento del ingreso medio, el aumento de los salarios y el fuerte componente de los programas sociales”, comentó Gildardo López, académico de la Universidad Panamericana.
Las cifras respaldan este enfoque: durante el sexenio, el salario mínimo creció un 121.9%, y las reservas del Banco de México aumentaron en un 30.4%, según datos de Integralia Consultores. A pesar de la crisis económica global y la pandemia de COVID-19, la economía mexicana mantuvo una relativa estabilidad, cerrando 2023 con un crecimiento del 3.2%.
Ayotzinapa e inseguridad: las grandes deudas
Sin embargo, no todo fueron avances. El caso Ayotzinapa, que López Obrador prometió resolver, sigue sin respuestas concretas. Este 26 de septiembre se cumplieron diez años de la desaparición de los 43 normalistas, y aunque el gobierno retomó la investigación, aún no se ha esclarecido lo ocurrido.
“Se avanzó, pero no como quisiéramos”, admitió el presidente. El país también enfrenta un problema mayor con más de 72 mil cuerpos sin identificar en los Servicios Médicos Forenses (Semefos) y 115 mil desaparecidos registrados.
El tema de la inseguridad fue otro de los grandes pendientes. A pesar de los esfuerzos del gobierno, México sigue luchando contra la violencia relacionada con el crimen organizado. Según una encuesta de Enkoll, el 44% de los mexicanos considera que la inseguridad es el mayor problema del país. López Obrador implementó la Guardia Nacional para enfrentar este desafío, pero los resultados no han sido suficientes para reducir los niveles de violencia.
Corrupción: entre avances y críticas
La corrupción fue otro tema recurrente durante el sexenio. Aunque López Obrador prometió combatirla, el escándalo de Segalmex y otros casos de corrupción en proyectos emblemáticos empañaron su gestión. El Tren Maya y la refinería Dos Bocas fueron señalados como ejemplos de proyectos que, aunque ambiciosos, estuvieron marcados por irregularidades.
“El tema de la deuda de Pemex es una bomba de tiempo que debe enfrentar la próxima administración”, señaló Saul Vázquez Torres, integrante del PRD Estado de México, al referirse a la gestión financiera de AMLO.
Relaciones exteriores: desencuentros y desafíos
En el ámbito internacional, López Obrador tuvo momentos tanto de éxito como de fricción. Durante su mandato, hubo desencuentros diplomáticos con países como España, Estados Unidos y Argentina. El distanciamiento con España fue uno de los más comentados, especialmente tras la decisión de no invitar al jefe de Estado español, el rey Felipe VI, a la toma de posesión de Sheinbaum.
Sin embargo, AMLO también fue reconocido por su papel en el rescate de Evo Morales durante la crisis política en Bolivia, un gesto que algunos consideran uno de los momentos más importantes de su política exterior.
“El presidente olvida que viene la renegociación del T-MEC en un año”, advirtió José Perdomo Galicia, especialista en Derecho Administrativo de la Universidad La Salle. La relación con Estados Unidos y Canadá será crucial para el futuro económico del país.
Morena: el nuevo partido dominante
López Obrador no solo deja como legado sus obras y políticas, sino también un movimiento político consolidado. Morena ha desplazado a los partidos tradicionales, logrando la mayoría en ambas cámaras del Congreso y el control de 24 de los 32 estados del país. Este poder político será clave para la administración de Sheinbaum, quien tomará las riendas de la Cuarta Transformación.
La nueva era de la comunicación política
Un aspecto que definió el sexenio de AMLO fue su constante interacción con los medios a través de las conferencias mañaneras. Este espacio, donde el presidente informaba y respondía preguntas de la prensa, fue criticado por algunos sectores que lo veían como una estrategia para monopolizar la comunicación. Sin embargo, otros lo consideran un ejercicio de transparencia y diálogo abierto.
A medida que Claudia Sheinbaum asuma el cargo, queda por ver cómo continuará con este legado de comunicación directa con el público.
El reto para Sheinbaum: continuar la Cuarta Transformación
Claudia Sheinbaum enfrentará la tarea de continuar con la Cuarta Transformación, el movimiento que López Obrador inició en 2018. Entre los principales desafíos que heredará están la consolidación de los proyectos de infraestructura, el combate a la inseguridad y la corrupción, y la mejora del sistema de salud, que no logró alcanzar los estándares que AMLO prometió.
Con el respaldo de un partido fuerte y una base de seguidores leales, Sheinbaum tiene la oportunidad de darle continuidad a los logros del sexenio anterior, pero también deberá abordar los retos que quedaron sin resolver.
El mandato de López Obrador ha dejado una marca indeleble en la historia de México. Ahora, con Claudia Sheinbaum al frente, el país se prepara para enfrentar una nueva etapa llena de desafíos y oportunidades.
