El presidente Andrés Manuel López Obrador ha propuesto la posibilidad de prohibir el uso medicinal del fentanilo y dijo que pedirá a médicos y científicos mexicanos que analicen si en su lugar se podrían usar otros analgésicos fuertes.
López Obrador tuvo mucho que decir esta semana sobre el poderoso opiáceo sintético al que se atribuye el aumento de las muertes por sobredosis de drogas en Estados Unidos y la creación de tensiones entre México y su vecino del norte.
En su conferencia de prensa del miércoles por la mañana, el presidente afirmó que si su administración logra prohibir el fentanilo en entornos médicos, solicitará que EE. UU. haga lo mismo.
También aseguró que actualmente su administración está haciendo más trabajo contra el fentanilo que Estados Unidos, donde alegó que la droga se distribuye con impunidad y no se conocen decomisos ni arrestos de los responsables.
Sin embargo, agregó, a los legisladores y autoridades estadounidenses les resulta fácil culpar injustificadamente a México.
López Obrador también argumentó que los jóvenes en los EE. UU. recurren a las drogas debido a la desintegración de las familias y los valores morales, y que los EE. UU. deben abordar los sentimientos de infelicidad, abandono e insatisfacción de los jóvenes como lo hace México.
En su conferencia de prensa del jueves por la mañana, rechazó las críticas de Estados Unidos a su historial de tomar medidas enérgicas contra el tráfico de fentanilo al decir que México no es responsable de la mayor parte del fentanilo que ingresa a Estados Unidos.
El mes pasado, Anne Milgram, jefa de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) de EE. UU. dijo en una audiencia del Congreso sobre narcotráfico que el Cartel de Sinaloa de México y su rival Cartel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) eran responsables de la “gran mayoría del fentanilo que ingresa a los Estados Unidos”. Estados.”
“Yo sostengo que a Estados Unidos y Canadá llega más fentanilo directo que a México”, rebatió López Obrador.
El presidente de 69 años, cuyo mandato finalizará el 30 de septiembre de 2024, dijo que las autoridades mexicanas le habían explicado que en México solo aparecieron pastillas de fentanilo azul.
“En los Estados Unidos, tienen todos los colores y sabores”, dijo.
Las autoridades estadounidenses informaron que el fentanilo ilegal se produce en laboratorios mexicanos secretos que utilizan precursores químicos chinos y que la mayor parte se prensa en píldoras falsificadas que parecen medicamentos como Xanax, oxicodona o Percocet.
Algunos legisladores republicanos quieren que EE. UU. designe a las bandas de narcotraficantes mexicanas como organizaciones terroristas y que use el ejército de EE. UU. para combatirlas. López Obrador ha rechazado enérgicamente tales sugerencias, argumentando que su gobierno ha incautado más fentanilo ilegal que “nunca antes”.
“No vamos a ser sus sirvientes”, dijo sobre Estados Unidos y sus llamados a tomar medidas enérgicas contra los cárteles. “Fuimos elegidos por el pueblo de México para proteger a los mexicanos”.
Dijo que la DEA “ha demostrado que no puede manejar” el problema.
El ministro de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, dijo que quienes en Estados Unidos pedían medidas más duras eran “desagradecidos” por los esfuerzos de México. Él y López Obrador dijeron que los diplomáticos mexicanos al norte de la frontera comenzarían una campaña de educación pública en los EE. UU. para resaltar los esfuerzos de interdicción de México.
Sin embargo, solo ha habido informes dispersos y aislados de fentanilo medicinal que ingresa al mercado ilegal.
López Obrador dijo que otros analgésicos además del fentanilo eran la norma en la medicina antes y podrían usarse nuevamente si se consideran efectivos.
Si los médicos y científicos ven viable su propuesta, se comprometerá a combatir todo ingreso ilegal de fentanilo a México, agregó.
Un día después de la propuesta de prohibición, un destacado médico mexicano la descartó como poco práctica porque hay ciertos pacientes que responden favorablemente solo al fentanilo.
“Hay pacientes que solo se pueden controlar con este medicamento y, de hecho, el fentanilo es muy utilizado dentro del campo de la anestesia y cuidados intensivos”, dijo la Dra. Luz Adriana Templos Esteban, jefa de la División Clínica y de Cuidados Paliativos del Dolor. en el Hospital Gea González del Ministerio de Salud.
Templos dijo que el uso recreativo de fentanilo, cuando la dosis no se controla cuidadosamente, es muy peligroso y adictivo, pero no es fatal en el uso médico. Más bien, «ayuda a los pacientes [con] sus cirugías» y ayuda «a tratar el dolor intenso», dijo.
También señaló que si las autoridades quieren aprobar el reemplazo del fentanilo por morfina, oximorfona, oxicodona o hidromorfona, deben abordar la escasez de este tipo de medicamentos que existe a nivel mundial.
Con informes de El Economista, El Sol de México, Reuters y Associated Press
