Antimonumento en el Senado: Un Recordatorio de la Lucha del Poder Judicial
En la Avenida Paseo de la Reforma, frente al Senado de la República, se erige un antimonumento que simboliza la resistencia de los trabajadores del Poder Judicial Federal (PJF) contra la reforma judicial.
Esta obra, llamada «Memorial a la Resistencia», fue develada el 31 de octubre y busca visibilizar la lucha de miles de mexicanos que se han manifestado en defensa del Estado de derecho.
El antimonumento, diseñado por Merced Guilebaldo Carreón Valerio y Jorge Iván Rangel Mota Velasco, con la colaboración del artista Armando Ovalle, presenta una balanza sostenida por dos manos que representan al Poder Legislativo y al Ejecutivo.
Según sus creadores, este diseño ilustra cómo la reforma judicial amenaza con «romper la armonía política, jurídica, social y económica».
La colocación del antimonumento se realizó en el mismo lugar donde cientos de trabajadores del PJF levantaron campamentos para expresar su inconformidad con los cambios constitucionales propuestos por el partido Morena y sus aliados. «Este monumento no solo es una estructura; es un signo visible de nuestra lucha por preservar la justicia», afirmaron los diseñadores.
En la parte inferior de la balanza, una mano representa al Poder Judicial, ejerciendo presión para mantener su independencia frente a posibles manipulaciones. El centro de la balanza simboliza a los ciudadanos mexicanos. Además, una placa en el antimonumento reza: “2024, Año en el que los trabajadores y Juzgadores del Poder Judicial de la Federación defendieron la Patria, la Justicia y el futuro de México”.
Durante las movilizaciones en contra de la reforma judicial, participaron no solo trabajadores del PJF, sino también estudiantes universitarios y miembros de organizaciones civiles. Este esfuerzo colectivo ha sido fundamental para mantener viva la voz de quienes defienden un sistema judicial independiente y justo.
Los autores del antimonumento explicaron que su objetivo es dejar un legado en el imaginario colectivo sobre la lucha del PJF durante meses para frenar esta reforma. “La colocación del antimonumento no es simplemente sembrar fierros fríos en el concreto; es un recordatorio vivo de nuestra resistencia”, afirmaron.