En el esperado debate presidencial del jueves por la noche, transmitido por CNN, los candidatos Joe Biden y Donald Trump mostraron un profundo contraste en sus posturas y enfoques. Trump acusó a los inmigrantes de ser responsables de casos de aborto en mujeres violentadas, culpando a las políticas migratorias de Biden de permitir tales agresiones. Además, criticó fuertemente la gestión de Biden en política internacional, afirmando que bajo su presidencia no existirían conflictos en Ucrania ni en Gaza e Israel, y lo calificó de «débil palestino».
Por su parte, Biden contraatacó, argumentando que Trump no comprende el funcionamiento global y recordando su intención de retirar a Estados Unidos de la OTAN.
Biden, con voz ronca y a veces poco clara, defendió su gestión en seguridad fronteriza, aunque Trump aprovechó para señalar su supuesta incoherencia. «No sé lo que dijo al final de esa frase. No creo que él lo sepa tampoco», comentó Trump.
El debate también abordó temas como la política exterior y la inflación, pero tomó un tono amargo y personal. Biden destacó las condenas criminales de Trump, mientras que este respondió mencionando las recientes acusaciones contra Hunter Biden. El intercambio se volvió aún más tenso cuando Biden acusó a Trump de haber tenido relaciones con la estrella del cine para adultos, «Stormy» Daniels durante el embarazo de su esposa, a lo que Trump negó rotundamente.
Este enfrentamiento marcó un hito histórico al ser la primera vez que un presidente en funciones y un ex presidente debatieron en un escenario público, mostrando la profundidad de las divisiones políticas actuales en Estados Unidos.
