Canadá y China en tensión: Sanciones por Derechos Humanos y respuestas diplomáticas
El Gobierno de China condenó el 11 de diciembre las recientes sanciones impuestas por Canadá a ocho funcionarios chinos, acusándolos de graves violaciones a los derechos humanos.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Pekín criticó a Ottawa, afirmando que “no está en posición de dar lecciones y señalar a otros” en esta materia.
Las sanciones canadienses se producen en un clima de creciente tensión entre ambos países. Según el vocero del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Mao Ning, las acusaciones son «falsas» y las sanciones son «ilícitas».
Esta medida es vista como parte de un esfuerzo más amplio por parte del Gobierno canadiense para alinearse con los intereses de Estados Unidos, lo que ha llevado a expertos a señalar que Ottawa busca «demostrar lealtad a EEUU al difundir las mentiras políticas de Washington».
Analistas del diario Global Times argumentan que las acciones de Canadá son «imprudentes e irresponsables» y podrían perjudicar las relaciones bilaterales con China. Mao Ning subrayó que Pekín ha logrado avances en materia de derechos humanos y cuestionó el historial canadiense, recordando que los indígenas canadienses enfrentan discriminación racial sistémica y un trato injusto.
«En lugar de afrontar sus propios problemas, Canadá opta por desprestigiar a otros países», afirmó Mao. Este comentario resalta la percepción en China de que Canadá está desviando la atención de sus propios desafíos internos.
Ali Haidong, profesor en la Universidad de Asuntos Exteriores de China, opinó que Ottawa está buscando mostrar su lealtad a la administración saliente de Biden.
Por su parte, Lu Xiang, investigador de la Academia China de Ciencias Sociales, criticó la falta de autonomía en la política exterior canadiense, sugiriendo que sigue ciegamente los pasos de Washington.