Crisis en Bolivia: Arce denuncia toma de cuarteles por seguidores de Evo Morales
El presidente de Bolivia, Luis Arce, acusó a «grupos armados» afines al exmandatario Evo Morales de haber tomado por asalto tres unidades militares en el Trópico de Cochabamba, lo que considera un acto de «traición a la patria». Esta situación ha desatado tensiones políticas y sociales en el país.
Arce hizo la denuncia en su cuenta de X, informando que los asaltantes han retenido a militares y sus familias como rehenes, amenazando sus vidas. «Denunciamos ante el pueblo boliviano y la comunidad internacional que grupos armados afines a Evo Morales han tomado por asalto tres unidades militares en el Trópico de Cochabamba», afirmó el presidente.
La toma de estas instalaciones, que se producen en un contexto de protestas por parte de seguidores de Morales, es vista por Arce como un acto delictivo y una afrenta a la Constitución y a las Fuerzas Armadas. El presidente resaltó que los militares retenidos no están involucrados en ningún operativo, sino que simplemente resguardan sus unidades. «Ellos son de origen popular, y muchos también tienen raíces indígenas originarias», agregó, señalando la gravedad de la situación.
En medio de este caos, se lleva a cabo un operativo militar y policial en Cochabamba para levantar bloqueos de carreteras que han durado 19 días, impulsados por los seguidores de Morales. Estas protestas buscan la eliminación de los procesos judiciales que enfrenta el exmandatario por delitos como trata y estupro, además de reclamar soluciones a la crisis económica del país y la defensa de su candidatura presidencial para las elecciones de 2025.
Arce también subrayó que la ocupación de las unidades militares, que incluye el acceso a armamento, es un acto criminal que dista de cualquier reivindicación social legítima. «Estas acciones estrangulan económicamente al pueblo boliviano… buscan la ruptura del orden público y de nuestra democracia», advirtió.
En medio de estas tensiones, Evo Morales se dirigió a Arce en una carta abierta, criticando su gestión y comparándolo con la expresidenta interina Jeanine Áñez, a quien acusó de haber perpetrado un golpe de Estado en 2019. Morales le advirtió a Arce que sería «responsable de herir y dividir a Bolivia» si las carreteras son desbloqueadas.