Ha transcurrido una semana desde la desaparición de cinco jóvenes en Lagos de Moreno, Jalisco, quienes fueron vistos por última vez en la Feria del municipio. Aunque las investigaciones siguen su curso, aún no se ha establecido una versión oficial de los hechos.
La Fiscalía General de Justicia de Jalisco ha estado trabajando en el caso, pero hasta el momento no se ha logrado encontrar rastro alguno de Diego Alberto Lara Santoyo, Roberto Olmeda Cuéllar, Uriel Galván, Jaime Adolfo Martínez Miranda y Dante Hernández.
Los jóvenes, amigos que acudieron a la Feria de Lagos de Moreno el viernes 11 de agosto, desaparecieron sin dejar rastro. Esto desencadenó la preocupación de sus familiares y la presentación de una denuncia por su desaparición.
La incertidumbre aumentó cuando comenzaron a circular en redes sociales imágenes y un video que supuestamente mostraban el presunto asesinato de los jóvenes. En el material se observaba a uno de los jóvenes, Jaime Adolfo Martínez Miranda, sobreviviendo mientras el resto parecía haber sido asesinado.
Según fuentes no oficiales, el video sugería que los jóvenes podrían haber sido coaccionados para cometer actos violentos entre ellos, lo que resultó en la pérdida de vidas.
En medio de esta situación, el martes 15 de agosto, la Fiscalía de Jalisco anunció el hallazgo de un cuerpo calcinado en el maletero de uno de los autos en los que viajaban los jóvenes. El vehículo había sido incendiado por completo. Aunque se mencionó la posibilidad de que los cuerpos calcinados encontrados en una finca correspondieran a los jóvenes desaparecidos, los análisis genéticos para confirmar la identidad aún están pendientes.
El padre de uno de los jóvenes, Jaime Adolfo Martínez, declaró que no pudo reconocer los restos calcinados como los de su hijo, manteniendo la esperanza de encontrar a los jóvenes en mejores condiciones.
Aunque se especula sobre la posible participación del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en el caso, ninguna versión ha sido oficialmente confirmada por las autoridades. La presencia de las letras «MZ» en la finca donde se encontraron los cuerpos calcinados ha dado lugar a hipótesis sobre su posible relación con el Cártel de Sinaloa.
El viernes 18 de agosto, una semana después de la desaparición de los jóvenes, familiares, amigos y la comunidad realizaron una marcha silenciosa y una misa en Lagos de Moreno, exigiendo justicia y respuestas sobre el caso que ha conmovido a la sociedad mexicana.
La Fiscalía y el Gobierno de Jalisco siguen trabajando arduamente en la investigación, mientras se espera que la Fiscalía General de la República tome a su cargo el caso en los próximos días. La incertidumbre y la búsqueda de respuestas persisten en torno a la desaparición de estos jóvenes.
