Redacción Mx Político.- Adán Augusto López Hernández, exsecretario de Gobernación y aspirante presidencial autodenominado «el más cercano al presidente», no solo quedó rezagado en la carrera, sino que se hundió en el inesperado cuarto lugar, demostrando que el respaldo millonario de sus amigos no fue suficiente para catapultarlo al éxito.
Durante el proceso de selección interna de Morena para elegir a su candidata presidencial, Adán Augusto solicitó el apoyo de un grupo selecto de empresarios, quienes respaldaron una campaña extravagante que superó en un 200% el límite establecido por el partido. Aunque el exsecretario aseguró haber invertido 2.4 millones de pesos de su propia cartera, se estima que el gasto total superó los 15 millones de pesos.
Los empresarios que respaldaron financieramente a Adán Augusto fueron Arturo Ávila Anaya, coordinador de campaña, Fernando Padilla Farfán, constructor con vínculos en Veracruz y Puebla, León Brener-Hellmund, especialista en armamento, y el fallecido proveedor de Pemex, Daniel Flores Nava.
Sin embargo, el derroche y excesos mostrados durante la campaña resultaron ser la causa de su inesperado desplome. Fuentes cercanas a Palacio Nacional indican que el presidente Andrés Manuel López Obrador se enojó por el gasto ostentoso, llevando a la «corcholata» a ocupar el cuarto lugar en las preferencias, incluso por debajo del diputado Gerardo Fernández Noroña.
Uno de los principales patrocinadores de la campaña fue Arturo Ávila Anaya, proveedor del sector de seguridad y militar, cuya empresa fue inhabilitada en 2021 por irregularidades en un contrato con la Sedena. Su deseo de ocupar una posición política se reflejó en su participación en la campaña de Morena en 2016 y su papel como titular de la Dirección de Enlace con Gobernadores y Alcaldes en 2022.
Fernando Padilla Farfán, constructor veracruzano, fue el operador clave de Adán Augusto en su estado natal y Puebla, obteniendo contratos por alrededor de mil 600 millones de pesos en el actual sexenio. Su firma, el Consorcio Inmobiliario y Construcción Aspen SA de CV, no solo impulsó a López Hernández, sino que también respaldó perfiles afines al político tabasqueño.
León Brener-Hellmund, consejero presidente de Industrias Tecnos SA de CV, fabricante de municiones, y propietario de otras empresas vinculadas al sector, mantuvo una estrecha relación con el exsecretario de Gobernación, incluso convirtiéndose en accionista mayoritario del equipo de beisbol los Piratas de Campeche. Recibió contratos por casi 500 millones de pesos del gobierno de Layda Sansores.
El fallecido Daniel Flores Nava, proveedor de Pemex, acumuló su fortuna a través de contratos en el Sistema Nacional de Refinación y obras públicas en Veracruz y Chiapas. Participó trascendentalmente en la integración de la refinería de Dos Bocas y acompañó a Adán Augusto en sus actos proselitistas en Veracruz antes de fallecer en un accidente aéreo.
A pesar de los esfuerzos y la inversión millonaria de estos empresarios poderosos, Adán Augusto López Hernández no logró despegar en las preferencias electorales, quedando en un cuarto lugar que sorprendió a propios y extraños.
con información de Emeequis
