Empate técnico entre Kamala Harris y Donald Trump a días de las elecciones presidenciales
A solo 60 días de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, las encuestas muestran un empate técnico entre la candidata demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump. Esta contienda se enfrenta a un panorama lleno de obstáculos, juicios y acusaciones que podrían influir en el resultado final.
Según el promedio de encuestas nacionales calculado por el New York Times, Harris tiene una ligera ventaja sobre Trump, con un 49% frente al 46% del republicano. Sin embargo, las elecciones en EE.UU. se deciden en unos pocos estados clave, no a nivel nacional. En 2020, la diferencia de solo 43 mil votos en estados como Wisconsin, Georgia y Arizona le dio la victoria a Joe Biden, mientras que en 2016, solo 80 mil votos en estados decisivos aseguraron la presidencia de Trump, según The Guardian.
Actualmente, las encuestas indican que Harris lidera en Pensilvania, Wisconsin y Michigan, mientras que el empate persiste en Nevada, Georgia, Arizona y Carolina del Norte. La situación es notablemente diferente a hace unas semanas, cuando Trump tenía ventaja en varios de estos estados.
Trump, quien enfrenta múltiples cargos criminales, se declaró no culpable en su último caso federal por interferencia electoral. A pesar de los juicios en curso, el expresidente y su partido se preparan para una posible crisis electoral, con estrategias para impugnar los resultados si son muy cerrados, y acusaciones de fraude sin evidencia. Por su parte, los demócratas también se están preparando para una posible disputa, con una unidad dedicada a la protección del voto y la contratación de abogados.
El próximo 10 de septiembre, los dos candidatos se enfrentarán en su primer y único debate presidencial, transmitido en vivo a nivel nacional. En paralelo, la contienda electoral se está convirtiendo en la más cara de la historia, con una influencia desproporcionada de donantes multimillonarios sobre las posiciones políticas.
Mientras tanto, Hunter Biden, hijo del presidente Joe Biden, ha propuesto declararse culpable en un caso de manejo fiscal ilícito para evitar un juicio adicional, aunque aún se espera la decisión del juez. Este asunto, aunque relevante, ha perdido parte de su impacto político tras la retirada de Joe Biden de la contienda electoral.
