Gustavo Petro ordena bombardeos contra disidencias de las FARC en El Plateado
El presidente de Colombia, Gustavo Petro Urrego, tomó la decisión de bombardear posiciones de un grupo disidente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en la localidad de El Plateado, ubicada en el departamento del Cauca, al suroriente del país. La orden se emitió el sábado 12 de octubre, tras un ataque de los guerrilleros con drones explosivos que dejó 17 heridos entre civiles y militares, según informes de la prensa local.
“El EMC (Estado Mayor Central) al bombardear población civil nos obliga, por el principio de proporcionalidad, a bombardear sus fuerzas. Les envío un mensaje: venzan la codicia y hagan la paz en favor del pueblo colombiano”, afirmó Petro en su cuenta de la red social X. Este anuncio se enmarca dentro de la Operación Perseo, que busca recuperar el control territorial en El Plateado, un municipio de aproximadamente 8,000 habitantes que ha estado bajo el dominio del Estado Mayor Central, un grupo que no participó en las negociaciones de paz con el Gobierno.
El general del Ejército colombiano, Luis Emilio Cardozo Santamaría, informó que las fuerzas militares ya habían tomado el centro del poblado y subrayó que “no hay territorio vedado para la fuerza pública”. En sus declaraciones, Cardozo enfatizó la necesidad de que la población local se involucre en el cambio de sus economías ilegales para poder vivir en paz. “Si ustedes no ayudan y no contribuyen al cambio en sus territorios y en su economía va a ser muy difícil que ustedes puedan vivir en paz y en tranquilidad”, advirtió.
Petro también hizo un llamado a las juntas de acción comunal y a las organizaciones populares en la zona a “dejar de atender órdenes impuestas del MC”. Enfatizó que la región debe ser gobernada por la población civil y no por grupos que mantienen vínculos con “mafias mexicanas y extranjeras”, en referencia al grupo guerrillero Carlos Patiño, que controlaba la zona.
El presidente anunció su intención de visitar El Plateado con todo su gabinete para trazar un plan de inversiones inmediato, señalando que la región se ha convertido en “una bolsa internacional de la cocaína” tras más de cinco años de dominio del Estado Mayor Central. En otro mensaje, Petro prometió que, tras la acción militar, se entregarán a los campesinos del cañón del Micay “el poder en la región, semillas de producción lícita y atención social del Estado”.
