En un artículo reciente del diario estadounidense The Wall Street Journal, se pone de manifiesto la preocupación de inversionistas y críticos sobre la posibilidad de que el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) continúe ejerciendo una influencia significativa en la política del país incluso después de su retiro.
La pieza titulada «El presidente de México lo llama una gira de despedida. Sus críticos ven un movimiento de poder» de José de Córdoba, expone cómo AMLO podría seguir dirigiendo el país tras bastidores desde su hacienda.
López Obrador ha estado llevando a cabo lo que él denomina una «gira de despedida» a lo largo del verano, organizando mítines festivos en los que sus seguidores compran muñecos de recuerdo a su imagen, ondean pancartas y corean su nombre. Esta serie de eventos ha sido vista con escepticismo por analistas y opositores políticos, quienes temen que el mandatario esté estableciendo las bases para seguir influyendo en la política nacional a través de su sucesora y protegida, Claudia Sheinbaum, la presidenta electa.
Preocupaciones de los Inversionistas
Según el WSJ, la habilidad de López Obrador para movilizar el apoyo popular y su evidente disfrute de este poder ha generado inquietudes entre los inversionistas. Alejo Czerwonko, ejecutivo de UBS Global Wealth Management, comentó que el futuro de México se percibe «nublado», expresando preocupaciones sobre un posible resurgimiento de un régimen de partido único.
Estas dudas se basan en la percepción de que AMLO podría estar utilizando la mayoría legislativa de su partido para impulsar reformas constitucionales antes de dejar el cargo en octubre.
Influencia Persistente en la Agenda Política
El artículo de The Wall Street Journal sugiere que López Obrador está estableciendo la agenda inicial para Sheinbaum, preparándola para continuar con sus políticas y posiblemente utilizando su influencia para guiarla desde las sombras. Esta estrategia es vista por muchos como una manera de mantener un control indirecto sobre el gobierno, asegurando que su visión y políticas sigan siendo implementadas.
«Muchos dudan de que se trate de un retiro silencioso», resalta el medio, reflejando la percepción general de que López Obrador no se desvinculará completamente del poder. Los críticos temen que, a pesar de dejar la presidencia, AMLO convierta su hacienda en una oficina de operaciones políticas, actuando como un poder detrás del trono y moldeando las decisiones clave del gobierno de Sheinbaum.
