Redacción Mx Político.- Japón reforzó aún más los controles fronterizos para los viajeros de China continental el domingo, requiriendo prueba de una prueba negativa de COVID-19 en medio de un aumento de casos en el país vecino.
Desde septiembre de 2022, los viajeros del extranjero que hayan sido vacunados al menos tres veces no necesitan hacerse pruebas de coronavirus dentro de las 72 horas previas a la salida para demostrar que no están infectados.
Sin embargo, las personas que llegan desde China continental ahora deben presentar prueba de una prueba de COVID negativa realizada dentro de las 72 horas previas a la salida. El nuevo requisito no se aplica a aquellos que vuelan desde Hong Kong o Macao.
Además, todos los viajeros de China continental y aquellos que han visitado el país dentro de los siete días ahora deben realizar una PCR o una prueba de antígeno de alta sensibilidad al llegar a Japón, en lugar de una simple prueba de antígeno como antes.
Aquellos que den positivo por COVID-19 a su llegada deben permanecer en cuarentena durante siete días si presentan síntomas o cinco días si son asintomáticos.
El gobierno continuará restringiendo las salidas y llegadas de vuelos directos que conectan Japón con China continental a cuatro aeropuertos: Narita, Haneda, Kansai y Chubu.
Si bien todos los aeropuertos del país estarán abiertos a vuelos directos desde Hong Kong y Macao debido a la reducción de casos de coronavirus en las dos ciudades, se ha solicitado a los operadores de aerolíneas que no aumenten la cantidad de vuelos.
Anteriormente, las llegadas desde Hong Kong y Macao estaban restringidas a los cuatro aeropuertos japoneses, así como a New Chitose, cerca de los aeropuertos de Sapporo, Fukuoka y Naha, siempre que ninguno de los pasajeros hubiera visitado China continental en los últimos siete días.
El domingo, las nuevas medidas para los viajeros de China continental se pusieron en práctica en el aeropuerto de Narita, cerca de Tokio, cuando 150 pasajeros de un vuelo desde Shanghái llegaron al aeropuerto por la tarde y enviaron muestras de saliva para la prueba de antígeno de alta sensibilidad.
Los pasajeros también mostraron prueba de una prueba negativa de COVID-19 en sus teléfonos inteligentes o documentos a los funcionarios del aeropuerto. Hideaki Kono, uno de los pasajeros y empleado de la compañía que había trabajado en Shanghai, dijo que tuvo dificultades para obtener la prueba en un hospital de la ciudad china, ya que estaba lleno de gente.
A partir de diciembre, China comenzó a flexibilizar significativamente sus estrictas medidas antivirus, incluida la no restricción de salidas, y también dejó de contar la cantidad exacta de casos diarios.
China reabrió el domingo las fronteras y abandonó las medidas de cuarentena, apartándose por completo de su estricta política de «cero-COVID» que implicaba bloqueos y medidas de aislamiento en las instalaciones designadas.
Japón relajó en gran medida sus restricciones fronterizas en octubre, lo que permitió a los viajeros saltarse las pruebas de COVID-19 a su llegada, siempre que demuestren haber recibido al menos tres vacunas o una prueba de COVID negativa dentro de las 72 horas previas a la salida.
Otros países del mundo también han intensificado los controles fronterizos para los viajeros de China.
