Jueces y Magistrados critican Leyes Secundarias de Reforma Judicial por su ambigüedad
Jueces y magistrados han expresado su preocupación por las leyes secundarias de la reforma al Poder Judicial presentadas por la presidenta Claudia Sheinbaum, calificándolas de “genéricas” e “insensatas”.
Durante una conferencia, el magistrado Juan José Olvera López advirtió que estas afirmaciones podrían resultar peligrosas, ya que permitirían a un tribunal de disciplina interpretar las normas de manera arbitraria.
“Las afirmaciones son muy genéricas y estarían a la libre disposición e interpretación de un tribunal de disciplina”, señaló Olvera, quien destacó que si se aprueban estas leyes, podrían surgir cuestionamientos legales como acciones de inconstitucionalidad y juicios de amparo.
Los jueces revisaron tres iniciativas presidenciales que incluyen la Ley Orgánica del Poder Judicial, la Ley de la Carrera Judicial y reformas a la Ley de Responsabilidades Administrativas. En particular, el capítulo sobre faltas administrativas establece que los servidores públicos del Poder Judicial podrían ser sancionados por “ineptitud técnica o jurídica” y “descuido en el desempeño de sus funciones”.
Olvera cuestionó el uso del término “descuido” sin especificaciones adicionales, preguntándose qué tan grave debe ser un descuido para justificar una sanción.
Además, advirtió que el inciso 9 sugiere que un juez podría ser sancionado si “ejerce sus atribuciones de forma claramente arbitraria”, lo cual también deja espacio para interpretaciones ambiguas.“
¿Qué significa ‘claramente’ o ‘arbitrario’? ¿Quién lo va a definir? ¿El tribunal de disciplina?”, se preguntó el magistrado. Esta falta de claridad en los términos utilizados genera inquietud sobre cómo se aplicarán estas leyes en la práctica.
Otro punto crítico se encuentra en el capítulo V, que aborda las sanciones. Este capítulo establece que un juzgador podría ser destituido por “faltas a la moral”, lo que plantea interrogantes sobre quién definirá qué constituye una falta moral.
Olvera enfatizó que aunque existen códigos de ética, es complicado establecer reglas rigurosas y obligatorias sobre moralidad.
A pesar de las preocupaciones planteadas, Olvera confió en que los legisladores considerarán estas observaciones y realizarán las correcciones necesarias. “Definitivamente son insensatas, pero concedamos el beneficio de la duda a los legisladores para que detengan estas reglas”, concluyó.