La iglesia pide tregua al Crimen Organizado por el Día de la Virgen de Guadalupe
La Iglesia de la Arquidiócesis Primada de México ha hecho un llamado a los grupos delictivos y al crimen organizado para que establezcan una tregua nacional con motivo de las celebraciones del 12 de diciembre, día de la Virgen de Guadalupe.
En un mensaje publicado en el semanario Desde la Fe, la iglesia reconoce la grave situación de violencia que enfrenta el país y la necesidad urgente de paz.
Un Llamado a la Paz
En su editorial titulada “12 de diciembre: No más muertos”, la iglesia expresa su deseo de que el próximo jueves sea un día en el que se silencien las armas. “Ante esta realidad, surgió un llamado dirigido especialmente a las organizaciones delictivas para que se establezca una tregua nacional de paz”, señala el documento.
La iglesia espera que el mensaje de la Virgen motive a los integrantes del crimen organizado a alcanzar un acuerdo para cesar la violencia, aunque sea por un día.
“Oramos a Santa María de Guadalupe y al Niño Jesús que está por nacer para que en esta Navidad cada familia pueda sentarse junta a la mesa, sin la sombra del luto causado por la violencia”, reza el mensaje.
Un Contexto de Violencia
La violencia en México ha dejado miles de muertes y ha generado un clima de tristeza y dolor en muchas comunidades.
La Arquidiócesis hace un llamado no solo a los criminales, sino también a los actores políticos para que eviten discursos polarizantes y hostiles, promoviendo en su lugar el respeto y el diálogo.
Antecedentes de Mediación
La iglesia ha jugado un papel importante como mediador en conflictos relacionados con el crimen organizado.
A principios de este año, logró establecer una tregua entre dos grupos antagonistas en Chilpancingo, Guerrero, donde se había desatado una ola de violencia. Gracias a los esfuerzos de los obispos locales, se logró un acuerdo que mantuvo la paz durante al menos dos semanas, sin reportes de asesinatos en la capital guerrerense.
La Situación Actual en Sinaloa
En Sinaloa, la violencia persiste, con enfrentamientos constantes entre facciones del extinto Cártel de Sinaloa. Los grupos Los Chapitos y La Mayiza han generado un ambiente de terror, afectando gravemente las actividades cotidianas.
Las escuelas han cerrado sus puertas y los comercios han visto una disminución significativa en su afluencia debido al miedo que sienten los ciudadanos.