López Obrador defiende reforma al Poder Judicial en medio de paro laboral
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha vuelto a defender su reforma al Poder Judicial, destacando que su propósito principal es erradicar la corrupción en las instituciones de justicia del país.
En un contexto marcado por la resistencia de trabajadores del sector judicial que se han declarado en paro y las críticas del embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, el mandatario reafirmó su postura durante su conferencia matutina en el Palacio Nacional.
López Obrador, quien fundó el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y es conocido por su enfoque en la lucha contra la corrupción, explicó que la reforma busca que los jueces y magistrados sean conscientes de que «representan al pueblo» y no a intereses particulares.
«Lo que queremos es que haya justicia en nuestro país, y eso solo se logrará si eliminamos la corrupción que ha permeado el sistema judicial durante años«, afirmó.
El paro de los trabajadores del Poder Judicial ha añadido presión al debate en torno a la reforma. Los empleados judiciales han expresado su preocupación por lo que consideran un ataque a la independencia del poder que ejercen.
Sin embargo, López Obrador desestimó estas críticas, argumentando que la verdadera independencia se logra cuando los jueces actúan en beneficio del pueblo y no de los poderosos.
La controversia en torno a la reforma también ha cruzado fronteras. Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, emitió una declaración advirtiendo que la reforma podría poner en riesgo la democracia y la relación comercial entre ambas naciones.
En respuesta, tanto López Obrador como Claudia Sheinbaum, quien se perfila como su sucesora, rechazaron enérgicamente la intervención de Salazar, calificándola de injerencista.
«Nosotros no aceptamos que representantes de gobiernos extranjeros se entrometan en asuntos que son competencia exclusiva de los mexicanos», declaró López Obrador, subrayando que su administración mantendrá una política de respeto a la soberanía nacional.
A pesar de las críticas y el paro laboral, el presidente dejó claro que no dará marcha atrás en su intento de reformar el Poder Judicial. «Estamos decididos a transformar a México, y eso incluye limpiar el Poder Judicial para que realmente sirva al pueblo», concluyó López Obrador.