Luis Arce celebra victoria sobre Evo Morales en el MAS
El presidente boliviano Luis Arce celebró con una ofrenda a la Madre Tierra la reciente decisión del Tribunal Supremo Electoral que lo reconoce como líder del Movimiento Al Socialismo (MAS), despojando de este título al exmandatario Evo Morales. Este acontecimiento marca un hito en la política boliviana, luego de una intensa disputa por el control del partido que gobernó el país durante casi 18 años.
Rodeado de dirigentes afines, Arce destacó la importancia de esta victoria, señalando que ahora el MAS está «a nombre de las organizaciones sociales, del pueblo». Grover García, quien asume la jefatura del partido, será el encargado de inscribir al candidato del MAS para las elecciones presidenciales de 2025. «Ahora tenemos el reto de ser democráticos, de elegir a nuestros candidatos por consenso», afirmó García, mostrando con orgullo la resolución judicial que respalda su liderazgo.
La controversia comenzó cuando Morales anunció su intención de postularse nuevamente por el MAS en 2022, lo que fracturó al partido y puso en riesgo su hegemonía. A pesar de que Morales insiste en seguir siendo el líder del partido, su rechazo a la nueva dirigencia ha generado tensiones internas. «Estamos convocando a la unidad para reconducir el MAS», indicó García a The Associated Press.
La situación se complica para Morales, quien enfrenta una investigación judicial por un presunto abuso a una menor ocurrido en 2016. El exmandatario se ha refugiado en la región cocalera del Chapare y ha evitado responder ante la justicia. A pesar de esto, continúa siendo una figura influyente y ha convocado a una reunión para discutir los pasos a seguir.
La celebración de Arce no solo simboliza un cambio en la dirección del MAS, sino que también refleja un cambio en las dinámicas políticas del país. Santusa Ramírez, una mujer aymara presente en la celebración, expresó su preferencia por Morales pero destacó que «si Arce resuelve la crisis económica que golpea a la nación andina, podrá creer en él».
