Migrantes apresuran su paso hacia EE. UU. antes de que Trump elimine programas humanitarios
A medida que se acerca la toma de posesión del presidente electo Donald Trump el próximo 20 de enero, cientos de migrantes en el sur de México están acelerando sus esfuerzos para ingresar legalmente a Estados Unidos.
En Tapachula, miles esperan en largas filas frente a las oficinas de migración, con la esperanza de asegurar un pasaje seguro hacia el norte antes de que Trump implemente cambios drásticos en las políticas migratorias.
La amenaza de cambios en políticas migratorias
Trump ha anunciado su intención de terminar con varios programas humanitarios establecidos por el presidente Joe Biden, incluyendo el programa que permite a los migrantes solicitar citas a través de la aplicación CBP One. Esta aplicación ha sido crucial para que muchos migrantes puedan acercarse a un puerto de entrada y obtener permisos para ingresar a EE. UU.
El gobierno mexicano ha implementado un programa de transporte en autobús para llevar a quienes tienen citas confirmadas en CBP One desde el sur del país hasta la frontera norte. Este esfuerzo busca proteger a los migrantes de las bandas criminales que extorsionan y secuestran a quienes viajan por México.
La urgencia entre los migrantes
Los migrantes están conscientes del tiempo limitado que tienen para cruzar la frontera. Johandry Paz, un migrante venezolano, expresó su determinación: «Llegaremos antes de que el presidente Donald Trump tome posesión, independientemente de las acciones que pueda tomar».
Otros, como José Escobar, un salvadoreño, también comparten esta urgencia: «Me confirmaron mi cita para el 4 de enero, así que tengo prisa».
Los autobuses del gobierno mexicano operan dos o tres veces por semana, transportando a los migrantes más de mil kilómetros hacia las ciudades fronterizas. Este servicio es vital para aquellos que buscan una oportunidad legal para establecerse en EE. UU.
Impacto de los programas humanitarios
Desde la implementación de CBP One y otros programas humanitarios, cientos de miles de migrantes han podido ingresar legalmente a Estados Unidos y obtener permisos de trabajo. Sin embargo, con la llegada de Trump al poder, muchos temen que estas oportunidades se vean severamente limitadas o eliminadas.