Renovación profunda del PRI: Un futuro con nuevas siglas y colores
Alejandro «Alito» Moreno propone una transformación radical del partido tras las elecciones de 2024
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) se prepara para una transformación significativa tras las elecciones del 2 de junio de 2024.
Alejandro «Alito» Moreno, líder nacional del partido, ha señalado que la renovación incluirá la posibilidad de cambiar no solo las siglas y el logo del partido, sino también su nombre y colores. Esta reforma busca adaptar al partido a los nuevos tiempos y acercarlo más a la ciudadanía.
Consultas a la Militancia y Ciudadanía
En una entrevista con Azucena Uresti, Moreno Cárdenas enfatizó la importancia de consultar a los 6.6 millones de mexicanos que votaron por el PRI en las recientes elecciones.
«Tendremos una profunda reforma, grandísima, al partido. Tendremos que ir a consultar a las y los millones de mexicanos que votaron por nosotros y lo que queremos es impulsar un partido más tecnológico, digital, cercano a la ciudadanía, discutir todos los temas, no solo nuestra ideología y nuestro plan de acción», explicó el líder priista.
La consulta abarcará diversas reuniones en todo el país, donde se discutirá la pertinencia de modificar el nombre, los colores y el logo del partido.
«Lo vamos a discutir, se van a hacer reuniones en todo el país para discutir no solo el nombre del partido, sus colores y su logo, que ha sido una propuesta que se ha presentado y hoy habrá que consultarlo a nivel nacional», enfatizó Moreno.
Modernización y Cercanía Ciudadana
Moreno Cárdenas destacó que uno de los principales objetivos de esta renovación es convertir al PRI en un partido más moderno y cercano a la ciudadanía.
«Queremos un partido más tecnológico, digital, que esté en sintonía con las necesidades y demandas de la gente», afirmó. Esta modernización busca integrar herramientas digitales y tecnológicas para mejorar la comunicación y la interacción con los ciudadanos.
Antecedentes y Contexto
El PRI, uno de los partidos más antiguos y tradicionales de México, ha visto un declive en su popularidad y apoyo en los últimos años. La necesidad de una reforma profunda se ha vuelto evidente tras los resultados electorales recientes y las crecientes demandas de una ciudadanía que busca un cambio en la forma de hacer política en el país.
El partido ha enfrentado críticas y desafíos internos que han llevado a sus líderes a considerar una reestructuración total. La propuesta de cambiar el nombre y los colores del partido no es solo una medida simbólica, sino una estrategia para revitalizar y reposicionar al PRI en el escenario político mexicano.
