Retorna a Tláhuac la diosa mexica Chalchiuhtlicue, “la de la falda de jade”
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) restituyó a Tláhuac, pueblo ancestral del sur de la Ciudad de México, una réplica de un brasero ceremonial con la efigie de la diosa Chalchiuhtlicue, “la de la falda de jade” para concluir con el corpus completo de este tipo de piezas prehispánicas, descubiertas hace casi 30 años en el área ejidal de San Pedro.
En agosto de 1995 el ciudadano Jesús Galindo Ortega reportó el excepcional hallazgo arqueológico de cinco Braseros Ceremoniales en tierras ejidales de San Pedro Tláhuac, consistente en cinco recipientes rituales elaborados en barro, todos de grandes dimensiones –entre 106 y 120 centímetros–, los cuales fueron recogidos por el Instituto Nacional de Antropología e para restaurarlos. En 2001 los braseros fueron trasladados al Museo Nacional de Antropología para su resguardo y exhibición permanente en la Sala Mexica.
El INAH promovió la reproducción de los braseros ceremoniales que representan a las deidades Chicomecóatl, “señora del maíz maduro”; Centeocíhuatl, “señora del maíz tierno”; Tonacatecuhtli, “padre de nuestro sustento”; Tláloc, numen del rayo, la lluvia y de los terremotos y, ahora, la diosa del agua, los lagos, ríos, mares y manantiales: Chalchiuhtlicue y que están expuestos en el Museo Nacional de Antropología, para restituirlos de forma simbólica a su lugar de origen.
Con esta entrega, se reencuentran las cinco divinidades descubiertas en agosto de 1995: Chicomecóatl, Centeocíhuatl, Tonacatecuhtli, Tláloc y Chalchiuhtlicue.