Con la proximidad de la toma de protesta de Clara Brugada como jefa de Gobierno de la Ciudad de México, la sucesión en la dirigencia local de Morena se encuentra en pausa. Sebastián Ramírez, actual presidente del partido, dejará su cargo para integrarse al gobierno federal de Claudia Sheinbaum, creando un vacío en la dirigencia que aún no ha sido llenado.
El desafío para Morena en la capital es la falta de definición sobre quién tomará las riendas del partido local. Aunque Brugada ya ha confirmado a varias figuras clave para su gabinete, aún quedan por definir diversos puestos y organismos. Esta situación ha llevado a una serie de especulaciones y negociaciones intensas entre los aspirantes a ocupar posiciones en la administración de Brugada.
Fuentes cercanas al oficialismo señalaron que muchas de las figuras de Morena, que tradicionalmente podrían haber aspirado a liderar el partido, ahora prefieren posiciones en el gobierno de Brugada. Según estas fuentes, los cargos en el Poder Ejecutivo ofrecen mayor influencia y relevancia en comparación con la dirigencia partidaria, especialmente en un período sin elecciones inmediatas.
Este panorama ha generado incertidumbre sobre la sucesión en Morena CDMX, ya que las negociaciones en curso podrían definir el futuro del partido en los próximos días. La falta de anuncios oficiales ha dejado a muchos observadores esperando con atención, especialmente tras la toma de posesión de los nuevos funcionarios federales, como Luisa María Alcalde y Andy López Beltrán, prevista para después del 22 de septiembre.
Entre los nombres que han circulado en la capital se encuentra el de Patricia Ortiz Couturier, exalcaldesa de Magdalena Contreras, aunque por el momento no hay confirmaciones oficiales sobre su posible rol en la nueva estructura del partido.
Mientras tanto, el retraso en la definición de la nueva dirigencia local refleja las tensiones internas y las prioridades cambiantes dentro de Morena, mientras el partido se ajusta a las nuevas realidades políticas bajo la administración de Clara Brugada.
Con información de LPO
