Ricardo Anaya ya tiene al candidato que apoya para dirigir al PAN
En medio del proceso interno para elegir a la nueva dirigencia del Partido Acción Nacional (PAN), el senador Ricardo Anaya ha expresado su apoyo a Jorge Romero Herrera, a quien considera capaz de liderar una transformación profunda del partido.
Con el lema «renovarse o morir«, Anaya subraya la necesidad de un cambio radical para que el PAN siga siendo relevante en el panorama político mexicano.
Durante una comparecencia ante los medios, Anaya reconoció que el PAN atraviesa una crisis, al igual que otras fuerzas políticas. “El dilema para el PAN en este momento es renovarse o morir. Es un momento crítico donde el partido debe abrirse a la ciudadanía de manera radical o corre el riesgo de dejar de ser útil para el país”, afirmó.
Según Anaya, la situación es tan grave que solo una reforma integral y audaz podría rescatar al partido.
Jorge Romero, el candidato con fuerza para la renovación
Anaya también fue claro en su respaldo a Jorge Romero Herrera como el candidato ideal para presidir el PAN. Señaló que Romero tiene la capacidad de convocar una asamblea nacional y procesar una reforma profunda de los estatutos del partido, necesaria para modernizar y abrir el PAN a la ciudadanía.
«Conozco el partido, y quien tiene la fuerza para convocar a una asamblea nacional y lograr esta apertura radical es Jorge Romero”, expresó Anaya.
Controversias inmobiliarias no preocupan a Ricardo Anaya
En la misma comparecencia, Anaya fue cuestionado sobre las acusaciones relacionadas con presuntas irregularidades inmobiliarias en las que se ha visto envuelto Jorge Romero durante su tiempo en la Ciudad de México.
Anaya, sin titubear, rechazó cualquier acusación formal y señaló que no hay evidencia en su contra: “Nunca ha sido formalmente acusado por una autoridad ministerial, mucho menos judicial. Creo que debemos fijar posiciones con base en evidencias, no en dichos”.
Contexto de crisis electoral en el PAN
El proceso de renovación llega en un momento delicado para el PAN, que tras las elecciones del 2 de junio de 2024, no solo perdió la presidencia de México, sino que también vio reducida su representación en el Congreso.
En este escenario, tanto Jorge Romero como Adriana Dávila Fernández han formalizado su intención de competir por la dirigencia nacional, en lo que promete ser una contienda clave para el futuro del partido.
Por último, las críticas hacia la actual dirigencia, encabezada por Marko Cortés, no se han hecho esperar. Militantes del PAN han acusado a Cortés de ser cómplice en un acuerdo con Romero para continuar con el mismo proyecto político que ha llevado al partido a sus recientes derrotas.
