Samuel García respalda el cierre de la Refinería de Cadereyta para combatir la contaminación en Nuevo León
El gobernador de Nuevo León, Samuel García, ha expresado su respaldo al cierre de la Refinería de Cadereyta, una instalación de Petróleos Mexicanos (Pemex) que ha estado operando por años en la entidad, generando preocupaciones ambientales significativas.
La posición de García ha cambiado en solo 11 días desde que afirmó que no podía intervenir en asuntos federales, incluida la planta de Pemex. En una carta publicada en sus redes sociales, titulada «Una carta para Nuevo León», el gobernador hace un llamado al gobierno federal y a Pemex para considerar seriamente la reubicación de la refinería.
«La Refinería de Cadereyta es una de las principales razones por las que tenemos varios días al año con calidad del aire fuera de norma, provocando un aumento en enfermedades respiratorias en niños. La Refinería debe irse de Cadereyta porque no podemos seguir comprometiendo nuestra salud y la de las generaciones futuras», argumentó García.
El mandatario señaló ejemplos de países asiáticos que han implementado zonas industriales alejadas de las áreas residenciales para reducir la contaminación y sugirió que Nuevo León debería seguir ese camino. Destacó que presentará una iniciativa al Congreso local para permitir que el estado tome medidas incluso en áreas de competencia federal.
«Es momento de dejar las refinerías en el pasado y velar por el futuro. Si lo más importante son nuestros niños y niñas, la Refinería debe irse de Nuevo León», destacó García.
La propuesta del gobernador busca abordar el problema de la contaminación en el área metropolitana de Nuevo León y busca una solución a largo plazo para mejorar la calidad del aire y la salud de sus habitantes. La reubicación de la Refinería de Cadereyta sería la clave, según la visión de García, para alcanzar este objetivo ambicioso.