En opinión de Carlos Ramos Padilla
Se comenta solo con… Llegaron los tiempos
Como cada seis años inician los ceremoniales, de los que se van y de los que llegan. Este lunes finalmente fue la última homilía presidencial llamada “mañanera” una especie de patibulo cotidiano en donde las acusaciones y descalificaciones eran normales. Se cerró este nocivo ciclo de “comunicación” con la rifa de un reloj, un pésimo video intentando ser una copia de “We Are the World. USA feo África” de 1985 )donde las figuras estelar fueron Eugenia León y Beatriz Gutiérrez), y una serenata veracruzana que no venía ni al caso mientras el país arde en crisis. amlo justificó que no podrá atender a los escasos invitados internacionales de Sheinbaum por protocolo y después llamó a los reporteros a un convivió “donde ustedes dijeron, traerían el desayuno”. No sé si se va o se queda al frente del mando nacional el tabasqueño, dependerá de Claudia, pero de que se le acabó la cuerda pues se le acabó. A partir de este martes ya no será presidente y así será tratado por todos, incluyendo el mosaico internacional. Ya Trump lo había advertido semanas atrás “para mí amlo ya no es el presidente”. Llega Sheinbaum disfrazada de una imagen de seguridad, falsa y anacrónica porque sabe, y apenas se va enterando, del desastre que le hereda amlo. Incluso se comenta que precisamente por ello el tabasqueño será indispensable para la presidenta. Muchos creemos que por el bien de ella, del país y del gobierno, en ese orden, se debe deslindar del personaje de Macuspana. No tiene que cargar con las consecuencias de una mal lograda Reforma Judicial que nos meterá en conflicto interno de carácter constitucional y de rompimiento con nuestros socios comerciales. Este jueves será crucial y veremos la confrontación de un poder contra los otros dos. Sheinbaum debe sacudirse de inmediato la conclusión de que nos gobierna un NARCOESTADO. De seguir con la política de los abrazos del peje la violencia irá escalando de manera impresionante. Ella, Sheinbaum, no debe menospreciar a las madres rastreadoras o a los niños sin medicamento. Debe revalorar el nombramiento, entre otros, de Mario Delgado al sentarlo en el escritorio de Vasconcelos. Los
Mensajes de ella deben ser a la nación, no a sus incondicionales o a su partido. Ojalá entienda, cosa que no hizo amlo desde jefe de gobierno del DF cuando decidió que primero los pobres, sin atender las necesidades de los “aspiracionistas” que son al final del carrete los que mantienen al país con sus impuestos, que todos los mexicanos somos iguales ante la ley y por tanto tenemos privilegios y obligaciones legales y morales para con el país. Que como científica regrese el apoyo a las universidades y a sus investigadores. Que cuando hablé del combate a la corrupción no lo haga sentada junto a Bartlet o López Gatell. Que mida las consecuencias y responsabilidades de proteger a quienes comercian con el fentanilo y otro tipo de tóxicos peligrosos. Que nos diga si puedo o no bajar la gasolina de 10 pesos por litro. Al protestar al cargo como presidenta de México está juramentando cumplir con las leyes, otro asunto que el tabasqueño no acató. Llegaron los tiempos y debe, Sheinbaum, decidir si pasa a la visita como estadista o simplemente la que se encargó de la gerencia de Macuspana con sede en Palacio Nacional. Por lo pronto el saliente, por sobre el respeto y cortesía a la presidenta, ya decidió hasta cuando se sale de Palacio. Así nada más.