Semestre de incertidumbre: Milei enfrenta la devaluación y la desconfianza del mercado
El panorama económico argentino enfrenta una tormenta de incertidumbre a medida que el gobierno de Javier Milei navega las turbulentas aguas de la devaluación y la desconfianza del mercado.
Tras el anuncio de la segunda etapa de su programa económico, centrado en la «emisión cero», los mercados han reaccionado con una caída en bonos y acciones, además de un aumento en los dólares paralelos, lo que ha ensanchado la brecha con la cotización oficial.
Reacciones del Mercado
El primer gran triunfo del gobierno de Milei, la sanción de la ley ómnibus, no ha generado el entusiasmo esperado en los mercados financieros. En cambio, el riesgo país ha subido y la distancia entre el dólar oficial y las cotizaciones paralelas se ha incrementado, intensificando las presiones devaluatorias. Los bonos y acciones argentinas han experimentado una caída, aunque esta tendencia se ha moderado en las últimas horas.
Los dólares paralelos, como el blue, el MEP (Mercado Electrónico de Pagos) y el Contado Con Liquidación, han alcanzado nuevos récords nominales históricos, rozando los 1,400 pesos argentinos. La brecha cambiaria con el dólar oficial, que cotiza a 934 pesos, ha llegado a un inflamable 50%. Esta situación ha elevado el riesgo país por encima de los 1,500 puntos básicos, sembrando más incertidumbre sobre el futuro financiero de Argentina.
Ante esta situación, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, ofrecieron una conferencia de prensa para calmar los ánimos. Sin embargo, evitaron proporcionar detalles sobre las políticas cambiarias a corto plazo, lo que no contribuyó a disipar las dudas del mercado. A pesar de las presiones del Fondo Monetario Internacional, el gobierno envió al Congreso un anticipo del Presupuesto 2025, proyectando un tipo de cambio de 1,016 pesos en diciembre, manteniendo una devaluación mensual del 2%.
Francisco Cantamutto, economista del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), comentó a Sputnik: «Todos los actores del mercado esperaban una corrección del tipo de cambio. Tras la aprobación de la ley ómnibus, parecía ser un momento adecuado para anunciar medidas de este tipo. Ahora parece que no hay un plan claro». Cantamutto señaló que el gobierno enfrenta obstáculos significativos para estabilizar su programa económico, a pesar de su confianza en sortear la presión financiera.
El gobierno de Milei ha sido criticado por no cumplir con sus promesas de dolarizar la economía y eliminar las restricciones cambiarias. Según Cantamutto, la continuidad de las políticas actuales ha generado desilusión en los mercados. «El ministro Caputo salió a decir que continuaría haciendo exactamente lo que venía ejecutando, algo que generó desilusión en los mercados», remarcó.
La Dilema de la Devaluación
El gobierno enfrenta una decisión difícil entre una nueva devaluación y un cambio en el equipo económico. Una devaluación podría comprometer el principal logro económico de Milei: la reducción de la tasa de inflación, que en mayo fue del 4.2%, la más baja en dos años. «La tasa de inflación viene bajando, pero si devalúa gran parte de ese logro se iría al diablo», señaló Cantamutto. Además, la inflación impactaría directamente en los precios de los bienes importados, afectando a la economía en general.
A pesar de los esfuerzos del gobierno por atraer capitales frescos, la falta de dólares sigue siendo un obstáculo estructural para la economía argentina. Las restricciones cambiarias, conocidas como «cepo al dólar», limitan las inversiones extranjeras, ya que los inversores no tienen garantizada la posibilidad de repatriar sus dividendos. «Como no hay divisas, si el gobierno eliminara el cepo al dólar afrontaría la posibilidad concreta de una corrida cambiaria y financiera», explicó Cantamutto.