Después de un largo proceso judicial, la ex titular de Sedesol, Rosario Robles, ha quedado absuelta de los delitos relacionados con la llamada Estafa Maestra. Un juzgado federal ha dejado firme la negativa de orden de aprehensión en su contra, lo que marca el fin de este capítulo en su caso.
Este era el único mandato de captura pendiente para Robles, el cual no fue ejecutado ni siquiera durante su periodo de reclusión en el Penal Femenil de Santa Martha. Aunque los delitos que se le imputaban conllevan prisión preventiva de oficio, la Fiscalía General de la República (FGR) optó por no proceder con la orden de aprehensión.
El proceso judicial se vio afectado por diversas decisiones judiciales, incluyendo un amparo otorgado a Robles para reponer el procedimiento de la orden de captura por delincuencia organizada y lavado de dinero. Sin embargo, un juez de control negó la aprehensión en abril pasado, al considerar que no estaba justificada la necesidad de detenerla.
La reciente decisión de un juzgado de amparo ha ratificado la negativa de la orden de aprehensión, señalando que cumple con los lineamientos de la sentencia del amparo otorgado previamente. Esto deja a la FGR con la opción de elaborar una argumentación más sólida si desea solicitar nuevamente la aprehensión de Robles.
Mientras tanto, Robles también enfrenta acusaciones por ejercicio indebido del servicio público relacionadas con los desvíos de fondos en la Estafa Maestra. Aunque ha sido liberada en dos instancias, todavía está pendiente un fallo definitivo de un tribunal colegiado sobre este caso.
En el caso específico que se negó la aprehensión, se le atribuye a Robles un supuesto lavado de dinero a través de “factureras” por más de 77 millones de pesos. Estos fondos estaban destinados a un convenio con la Universidad Autónoma de Morelos para realizar encuestas de beneficiarios de programas sociales, aunque la FGR sostiene que gran parte de estas encuestas nunca se llevaron a cabo.
