Drones en la Delincuencia: Un nuevo modus operandi en la CDMX
El uso de drones por parte de grupos del crimen organizado ha crecido alarmantemente en la Ciudad de México, facilitando robos a casas y ataques a civiles.
Este fenómeno se ha vuelto una preocupación para las autoridades y la ciudadanía, que ahora enfrentan un nuevo tipo de delincuencia tecnológica.
Un Caso Impactante
Recientemente, un incidente en Culiacán, Sinaloa, puso de relieve el peligro que representan los drones. Un auto estalló debido a un explosivo arrojado desde un dron, lo que provocó una explosión devastadora. Este evento no es aislado; los drones se han utilizado en diversas entidades para llevar a cabo ataques y robos, incluyendo la capital mexicana.
El comunicador Carlos Jiménez reveló que el grupo criminal al que pertenece César “N”, detenido recientemente, opera en las alcaldías Miguel Hidalgo, Cuajimalpa y Álvaro Obregón. Durante una orden de cateo, las autoridades encontraron un dron junto con armas, dinero en efectivo y joyas presuntamente robadas.
Modus Operandi de los Delincuentes
Desde 2015, los grupos criminales han utilizado drones para vigilar las casas de sus víctimas antes de perpetrar robos. Estos dispositivos permiten a los delincuentes identificar puntos de acceso y momentos en que los propietarios no están en casa.
Según la Universidad Veracruzana, muchos drones están equipados con cámaras que pueden capturar imágenes detalladas, facilitando así la planificación del delito.
Datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) indican que entre enero y octubre de 2024 se registraron 2,792 robos a casa habitación en la CDMX, 192 de ellos sin violencia. Aunque no se especifica el uso de drones en todos estos casos, el aumento de robos ha llevado a las autoridades a tomar medidas más estrictas.
Respuesta Legislativa
Ante este creciente problema, el Congreso de la Ciudad de México ha modificado el Código Penal local para agravar las penas por robo cuando se utilicen drones. Esta reforma responde a las demandas ciudadanas para imponer sanciones más severas a quienes empleen tecnología en actividades delictivas.
Además, fuera de la capital, estados como Michoacán y Guerrero también sufren el impacto del uso de drones por parte de grupos criminales como La Familia Michoacana y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Estos cárteles utilizan drones no solo para espiar sino también para llevar a cabo ataques contra rivales y fuerzas del orden.
