El arma secreta de Marcelo para ganar: su esposa
Prosa aprisa
Arturo Reyes Isidoro
Comentó ayer Joaquín López Dóriga en su columna “En Privado”, que publica en Milenio, que Marcelo Ebrard le aseguró que será el próximo presidente, y que reconoció que tiene un arma secreta: “Rosy, su esposa, quien, me aseguró, jugará un papel central en su campaña a partir del lunes”.
Rosy es Rosalinda Bueso Asfura, originaria de Tegucigalpa, Honduras, de 46 años, 18 años menor que él, empresaria y diplomática, quien siendo embajadora de su país en México conoció al ahora aspirante presidencial.
Creo –los especialistas saben muy bien de eso, yo no lo soy– que el éxito de un político se debe, en muy buen grado, o en mucho, no solo a su imagen personal sino también a la percepción que proyecta su esposa o, como se dice en México, su mujer.
Ayer el excanciller fue el primero en registrarse en forma oficial como aspirante a la candidatura de Morena. Lo hizo acompañado de ella y, al menos en mí caso, me gustó ver a la pareja junta anunciando que iniciarán su recorrido por todo el país.
En la columna del pasado 13 de abril (“El Club de Tobi) me referí al tema de las esposas de los políticos en el gobierno. Justifiqué que Cuitláhuac García no apareciera en los actos públicos y privados acompañado porque llegó soltero y así permanece y todo indica que se irá sin haberle dado a Veracruz una “primera dama”, como le llamaban a la esposa del gobernador en tiempos del PRI. Opiné que la ausencia de una pareja debió haberla suplido, en ocasiones especiales, su señora madre, una maestra respetada y apreciada entre quienes la conocen y la han tratado.
“Los actuales, ¿alguien sabe si están casados, si tienen esposas? ¿Alguna vez alguien los ha visto acompañados? En la pasada fiesta del 15 de septiembre, en la recepción elitista que hubo en el patio central del Palacio de Gobierno, ninguno se hizo acompañar por su esposa, si es que la tienen. Si el gobernador es soltero, ¿no debiera ser entonces el secretario de Gobierno, Eric Cisneros, quien debiera mostrarse con su esposa para proyectar, desde el gobierno, la unidad familiar que tanto buscan y aprecian los veracruzanos? En ese sentido, la administración cuitlahuista es una versión moderna del Club de Tobi: ‘No se admiten mujeres’. ¿Gobierno misógino, o machista?”
Expuse entonces que buena parte de la sociedad veracruzana es muy conservadora, en el sentido de que observa y conserva tradiciones, principios y valores, inspirados en su creencia religiosa, y que le gusta que sus gobernantes estén unidos en matrimonio, que actúen como pareja bien avenida, ejemplar, y que a través de esa figura proyecten la unidad familiar.
Durante 1998 acompañé como reportero en un recorrido previo por todo el estado y luego ya como colaborador suyo en su campaña a la gubernatura al licenciado Miguel Alemán Velasco. Fui testigo de cómo le sumó simpatías y apoyos, que se tradujeron en votos, su esposa Christiane Magnani, de una gran sencillez y carisma. No tengo ninguna duda de que lo ayudó a ganar.
Volviendo a Marcelo Ebrard, ha calificado a su “Rosy” como un “arma secreta”. Será interesante ver su desempeño a partir del próximo lunes. Dieron un gran paso. Miles de mujeres familiares de muertos y/o desparecidos a causa de la violencia y la inseguridad que ahogan al país los esperan y esperan que las escuchen, y no solo a la mamá de “El Chapo”. Por cuestión de género, creo que, en general, las mujeres van a ver bien que se haga acompañar por una mujer: su esposa. Ya veremos cómo actúan con respecto a sus parejas o esposas el resto de los presidenciables.
La decisión de Marcelo de hacerse acompañar por su esposa va a impactar también al resto de candidatos de la oposición, presidenciables y para los gobiernos de los estados. Será un acicate, pues. Veremos cuántos valientes dicen yo también.
En aquella columna del 13 de abril rematé diciendo: Después de la actual experiencia, creo que los veracruzanos serán más fijados en quiénes quieren que los gobierne y quién proyecta más la unidad familiar. Hasta ahora, de los que se mueven, lo mismo de Morena que de la oposición, solo uno, el diputado federal Sergio Gutiérrez Luna, se hace acompañar, cada vez que puede, de su joven esposa Diana Karina Barreras Samaniego, así como de sus dos pequeños hijos.
Todo indica que Cuitláhuac no se irá con Sheinbaum
Será mañana viernes cuando Claudia Sheinbaum se separe en definitiva de la jefatura de gobierno de la Ciudad de México para ir en busca de la candidatura presidencial de Morena.
A diferencia de Marcelo Ebrard, cuyo equipo renunció a la Secretaría de Relaciones Exteriores para acompañarlo en su campaña interna, todos los del equipo de Sheinbaum no se movieron. ¿Se quedaron, los dejó para que le sigan dando dinero (desviándolo) del gobierno capitalino para su campaña?
La mujer ya está por arrancar sus actividades proselitistas y hasta ayer no se sabía quiénes la acompañarán en sus recorridos. Porque ya no es un tema nuevo, la pregunta obligada es si siempre Cuitláhuac García Jiménez será el coordinador de su campaña.
A finales del año pasado se manejó fuerte la versión y preguntado al respecto, el gobernador no la confirmó pero tampoco la negó y pidió a los reporteros que le preguntaran a finales de este año, cabe suponer que porque pensaba que hasta entonces se iría Claudia, su jefa, del gobierno.
Más le hubiera valido que se hubiera definido. Ahora, si Sheinbaum lo llama, será como para que él y los suyos echen las campanas a vuelo, inunden el cielo de cohetes multicolores y manden a pintar su imagen en todas las escuelas del estado; si no, si lo vemos que no deja el palacio y sigue en el cargo, si arranca la campaña de su candidata y no va él al frente, no se la va a acabar con sus enemigos y malquerientes y, claro, bajarán más sus bonos.
¿Cuántos se quedarán a terminar con él y cuántos lo abandonarán?
El proceso presidencial interno de Morena ya marcó la pauta: aparte de las “corcholatas”, el presidente aprovechó para preguntar quiénes de sus colaboradores se quieren ir para buscar un cargo de elección popular (gubernaturas, senadurías, diputaciones) y quiénes se querían quedar con él. Pocos dieron un paso al frente. La mayoría prefiere tener segura sus quincenas, su aguinaldo y sus bonos.
En el plano local llegará la hora en que el gobernador, si no se va este fin de semana con Sheinbaum (¿no será que, si es cierta la versión, Cuitláhuac llevó a Zenyazen Escobar a que lo conociera el presidente para decirle que será su relevo, pero como gobernador sustituto?) también reúna a su manada… política y le pregunte quiénes lo van a acompañar hasta el final y quiénes se van a ir a buscar una diputación o una senaduría.
Dado que ya hemos visto que una buena cantidad, aun antes de los calorones, ya andaba como pepita en comal caliente buscando un hueso legislativo, lo más seguro es que quedarán muchas vacantes y entonces habrá una buena cantidad de aspirantes a sacrificarse para cargar con el Año de Hidalgo.
Nahle se promociona ya en su cuenta de Facebook
Aun no deja su cargo como secretaria de Energía, pero Rocío Nahle ya se empezó a promocionar en su cuenta de Facebook. “#Nahle Va” dice una especie de propaganda en la que se ve su imagen y presuntos simpatizantes suyos.
No ha recorrido el estado, no ha hecho ninguna gestión a favor de los veracruzanos, pero está atenida al dedazo y al apoyo del presidente y del gobernador. Hasta donde se sabe, aun todavía desarticulada, la oposición la está esperando.
Pero también sus competidores internos: Manuel Huerta, Sergio Gutiérrez, Zenyazen Escobar y Eric Cisneros, por lo menos, quienes sí se han estado movilizando por toda la geografía estatal.