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El fiscal de Los Ángeles podría recomendar que los hermanos Menéndez reciban una nueva sentencia.

El 20 de agosto de 1989, Lyle y Erick Menéndez asesinaron brutalmente a sus padres, José y Kitty, en su mansión de Beverly Hills, porque según los hermanos sufrieron abuso sexual, físico y emocional durante años.

En 1993, los hermanos fueron sometidos a juicio con dos jurados, uno para cada uno, el cual fue anulado porque los integrantes del jurado no llegaron a un acuerdo. En 1996, se les juzgó nuevamente, pero con un solo jurado, el cual los encontró culpables y fueron condenados a cadena perpetua.

El pasado 7 de octubre, la plataforma Netflix estrenó “Monstruos: La historia de Lyle y Erik Menéndez” reavivando el interés por los hermanos.

Ahora, el fiscal de Los Ángeles, George Gascón, en entrevista con People, ha anunciado que podría recomendar que los hermanos reciban una nueva sentencia ya que no cree que sean un peligro para la sociedad. «Francamente, probablemente no lo han sido por largo tiempo, si alguna vez lo fueron. Esto no es como que ellos estaban matando a la gente o robando en la calle«, pero que la decisión final será de un juez.

Erik, de 53 años, y Lyle, de 56, ya han pasado más de tres décadas en prisión.

«Ellos han estado en prisión por casi 35 años», dijo Gascón, «Treinta y cinco años es un largo tiempo para estar en prisión. Y especialmente si miras las circunstancias detrás de este caso, me parece que en algún punto tiene que haber un espacio para la redención y la rehabilitación», afirmó. «Mi decisión final va a ser realmente evaluar la ley«, aseguró sobre su recomendación de que reciban o no una nueva sentencia.

Karen VanderMolen, sobrina de Kitty Menéndez, dijo: «desde un principio siempre creí que Lyle y Erik eran víctimas del abuso de su padre. Karen añade que la corte no reconoció el trauma de sus primos. «El abuso de su padre destrozó sus vidas». Joan Andersen VanderMolen, hermana de Kitty, ha sido una gran defensora de sus sobrinos, asegurando que fueron víctimas de sus padres.

Entre la nueva evidencia que está siendo revisando está una carta que Erik supuestamente escribió a su primo Andy Cano, denunciando el abuso sexual de su padre. También está la denuncia de Roy Roselló, exintegrante de la banda Menudo, quien alega que fue violado por José Menéndez, quien era un ejecutivo discográfico en la década de 1980.

En solo unos días, un juez determinará si recibirán una nueva sentencia, haciendo posible su libertad.

Información de peopleenespanol.com

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