En opinión de Ramón Zurita Sahagún
¿Habrá reconciliación?
DE FRENTE Y DE PERFIL
RAMÓN ZURITA SAHAGÚN
¿Habrá reconciliación o acercamiento con los opositores de la 4T?
Es difícil que se produzca, aunque algunos ven asomo de posibilidad.
La presencia de los gobernadores opositores de Jalisco y Nuevo León (MC); Durango y Coahuila (PRI) y Aguascalientes (PAN) en el mitin convocado por MORENA en el Zócalo, deja abierta esa ventana.
Esos gobernadores que llegaron a gobernar bajo las siglas opositoras, pudieran ser parte del acercamiento que los dirigentes de partidos opositores y coordinadores de bancadas en la Cámara de Diputados y Senadores esperan se presente alguna vez.
Uno de los principales temas que saltan a la discusión pública es el desprecio y desatención que tiene el actual gobierno y partido hacia la oposición.
Constantes son las ocasiones en que los opositores de un lado y los gobernantes del otro lanzan obuses unos en contra de los otros.
Muchas oportunidades han existido en los seis años recientes para que opositores y gobernantes se sienten a dialogar o intenten sacar en conjunto las reformas legales, sean o no constitucionales.
Sin embargo, eso no ha pasado y los opositores han recibido un portazo en la nariz cuando lo intentaron.
Los dirigentes de partidos no han sido recibidos por los dos Presidentes que han desfilado en esos poco más de seis años y los gobernadores tampoco lo fueron en el pasado reciente.
Ahora parece que las condiciones cambiaron, ya que Claudia Sheinbaum Pardo ha dialogado y hasta recibido a gobernadores que administran sus estados bajo las siglas de la oposición.
Durante la pasada administración los opositores formaron un club de gobernadores para exigir mejor trato en la disposición de recursos y hasta amenazaron con salirse del pacto fiscal.
Nunca fueron atendidos en la medida de lo que querían, pero tampoco hicieron válidas sus amenazas y un signo de frustración se apoderó de ellos, por lo que incluso el grupo que encabezaba el ahora exgobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, sumó un fracaso más.
Los ánimos se encendieron en la oposición y crecieron cuando varios exgobernadores del PRI fueron nombrados miembros del servicio diplomático mexicano.
La brecha se hizo más grande, exacerbando los ánimos y polarizando a ciertos sectores de la población que apoyando a los partidos opositores exigían un mejor trato.
Nada de eso se hizo y se creyó que los comicios presidenciales de junio del año pasado serían el punto de ebullición para cobrarse esas afrentas, pero lejos de ello, MORENA y sus aliados obtuvieron una victoria contundente.
La abrumadora ventaja de Claudia Sheinbaum Pardo mostró que la 4T tenía todas las canicas en sus manos y que la política a seguir sería similar a la decretada por Andrés Manuel López Obrador.
Hace unos años con el cambio de secretario de Gobernación se creyó tender un puente entre gobierno y opositores, pero no fue así, Adán Augusto López fue comisionado para atender ese asunto y nunca lo hizo.
La Presidenta Sheinbaum Pardo ha sido cuestionada sobre el tema, dejando sentado que la secretaría de Gobernación es la aduana para atender los asuntos que requieran los partidos políticos.
Ahora asoma una nueva posibilidad, aunque muchos creen que la presencia de los cinco gobernadores (Pablo Lemus, Samuel García, Esteban Villegas, Manolo Jiménez y Teresa Jiménez) en el evento del informe de los primeros cien días de gobierno de la Presidenta de la República, son simplemente una cortesía de los mandatarios estatales que buscan tender puentes para llevar beneficios a sus estados de algunos de ellos y de otros que ya coquetean con pasarse a la 4T.
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La Presidenta Sheinbaum Pardo presentó el Plan México donde se prevén inversiones por 277 mil millones de dólares que pretenden llegar al país.
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