Minas de Tiza, en Tlaxcala, un un sorprendente laberinto de arcilla blanca
¡Imagina recorrer un laberinto hecho de arcilla blanca, lleno de portales, túneles, recovecos y galerías!
Esto es posible en las Minas de Tiza, un conjunto de cavernas de calcita que se encuentran en la zona alrededor de San Mateo Huexoyucan, unas cavernas de antiguas minas que están hechas de calcita o carbonato de calcio. Este mineral es el principal componente en la tiza o gis, como se le conoce principalmente en México.
La palabra tiza proviene del náhuatl tizatl, que quiere decir tierra blanca. La mayoría de hispanoparlantes utiliza «tiza», pero irónicamente en México se usa más el término «gis».
La calcita, que tiene aspecto de arcilla blanca, también se utiliza en la fabricación de un sinfín de productos como cemento, fertilizantes, cosméticos, aditivos, vidrio y caucho, entre otros.
En los años sesenta y setenta, las minas eran muy activas. Trabajadores solían extraer hasta cinco tráilers de calcita todos los días. Por mucho tiempo, las minas permanecieron abandonadas, hasta que algunos viajeros intrépidos descubrieron que eran un lugar interesante para visitar.
Uno de los principales atractivos es el juego que se crea con la luz del sol cuando entra por las diferentes aperturas de las cavernas. Dependiendo de la hora del día en que visites, tendrás una experiencia visual única y podrás tomar fotografías muy interesantes.
Las minas son perfectas para recorrerlas en bici, ya que puedes utilizarlas como pista. Si te gusta andar en motocicleta, también se prestan para hacerlo.
