El líder senatorial inauguró el Primer Seminario de Reconciliación por México, dirigido a su estructura de apoyo en los diferentes estados de la República, todos de filiación morenista. Destacó la presencia numerosa y bulliciosa de la delegación de Sinaloa en el evento de alcance nacional.
Redacción MX Político.- Fue un acto, como todos los planeados por él y su equipo, un evento significativo.
Hasta en la denominación del evento, había un mensaje cifrado: el “Primer Seminario por la Reconciliación por México”; una ambiciosa categoría que ni Olga Sánchez Cordero ni el actual titular de Segob, Adán Augusto López Hernández, han logrado consolidar en el país, ante los excesos de la violencia y el incremento en el índice delictivo.
Contando para tal efecto con delegaciones representativas de las 32 entidades del país, sin excepción alguna, el evento arrancó puntual y se desarrolló en las instalaciones de conocido hotel, muy cerca precisamente del CEN del PRI, conforme a lo planeado en la propia Convocatoria lanzada desde la semana pasada. También aquí pudo haber un mensaje cifrado; las instalaciones de uno de los partidos al que Morena y aliados combatirán implacablemente en las urnas este y el siguiente año en sendas elecciones.
Aunque a Ricardo Monreal Ávila, difícilmente se le puede considerar ya como una “corcholata” con posibilidades (en un precandidato presidencial por Morena), dado que hay versiones en el sentido de que desde diciembre ya hubo un acuerdo con él, para evitar la ruptura ante la definición del nombre de el o la abanderada en el próximo proceso presidencial de 2024, que por cierto no es el de Ricardo Monreal y ya se le notificó a él, a cambio de cierta negociación.
Sólo un insistente rumor, se aclara.
Aunque hay afanes desde la Presidencia por hacerlo aparecer en los últimos días como un “presidenciable” por Morena, como una “corcholata”. Y el impulso de esto viene desde la propia Presidencia de la República.
Tan sólo ayer, el diputado Ignacio Mier, presidente de la Jucopo en la Cámara de Diputados, homólgo de Monreal, le pidió disculpas públicamente por “no haberlo invitado a la Reunión Plenaria” recientemente; un afán de «operación cicatriz”, indudablemente.
Pero la “Reconciliación” es un trabajo que implica protocolos y parámetros muy técnicos. Sólo un área como la Secretaría de Gobernación tiene el instrumental y el personal capacitado para implementarla… ¿Será que ese es el destino negociado de Monreal (y que está muy próximo)?…
El evento sin embargo, contó con lo más álgido de su plantilla de operadores en los estados.
Una plantilla que se distingue por ser de operadores profesionales y técnicos, muchos de ellos que ocupan responsabilidades en los Gobiernos estatales de extracción morenista y alguinos más, incluso, gente no sólo con el perfil político, sino con experiencia en los planos legislativos y gubernativos.
Destacó la algarabía y el entusiasmo de la delegación de operadores monrealistas de Sinaloa, un estado que había sido “decretada” como simpatizante de Adán Augusto por el propio Gobernador Rocha Moya, de quien Adán Augusto dijo –como devolviendo la “flor”- que Rocha Moya era el “mejor gobernador del país” (sic).
No.. al parecer en Sinaloa no hay simpatías por decreto. Quizá fue una imprecisión del gobernador Rocha.
En Sinaloa tienen simpatizantes –y muy comprometidos- otros precandidatos también, como es el caso de Ricardo Monreal.
La comitiva estatal de Sinaloa le entregó al senador Monreal Ávila, un cuadro al óleo de su imagen y en todo momento contó con la atención del senador, que los atendió con sumo interés en sus inquietudes.
Destacaron en el evento, entre otros:
Por Culiacán:
Pablo Moreno Cota, exdirigente estatal del PRI en Sinaloa y de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos de la CNC, del PRI.
Jesús Armando Liogon Beltrán, exgobernador de la Prisión Federal de Islas Marías, dependiente de la Segob y exdelegado de la Segob y el CISEN en numerosas entidades del país.Exsecretario del Ayuntamiento de Culiacán.
Por Los Mochis:
Lucio Tarín Espinoza y Arturo Velázquez Benítez.
Por Mazatlán:
Octavio Loaiza y Roberto Laftoon.
hch
