En opinión de Jesús Michel Narváez
Pemex ¡en picada!

Punto de Vista

Por Jesús Michel Narváez

Pese a las “inyecciones” de capital, la condonación de impuestos y la reducción de las aportaciones al Presupuesto de Egresos de la Federación, los estados financieros de Petróleos Mexicanos alarman: sus pasivos son de un billón 552 mil millones de pesos.

Con todos los activos, incluyendo Dos Bocas, no lograría pagar la deuda.

A través de redes sociales, Mario Di Constanzo y otros especialistas además de legisladores como Federico Döring y Manuel Clouthier, difundieron los estados financieros se informó, fueron realizados por un contador independiente, lo que restaría credibilidad a la cifra mencionada.

Sin embargo, con todo y que se redujera la deuda, Pemex parece no tener salvación y durante este gobierno cuatrotero, el director Octavio Romero Oropeza, ingeniero agrónomo no petrolero ni político, ha sido incapaz de cumplir la meta de producción y exportación; la meta para 2024 fue fijada por el huésped temporal de Palacio Nacional desde el inicio de su gestión, para que la empresa flotara por sí sola.

La realidad superó la ficción.

Hoy Pemex debe más de 140 mil millones de pesos a proveedores y su deuda con bancos y financieras rebasa los 114 mil millones de dólares. Si se toma la cifra como buena, los estados financieros se acercan a la deuda descrita.

¿Dónde están los miles de millones de dólares obtenidos por exportación?

Los diputados de Morena y adláteres establecieron siempre, en los 6 años, precios de mercado inferiores y con mucho al real. Por ejemplo, para este año estimaron en 56.7 dólares y la cotización promedio en 2023 y 2024 promedia 87 dólares.

Se dirá para no “impactar la inflación” se destinaron subsidios a las gasolinas y al diésel por cerca de 400 mil millones el año pasado. De todas formas, descontando la suma, la deuda alcanzaría un billón 200 mil millones de pesos.

No hay explicación lógica.

La refinería Deer Park generó ganancias el año pasado, por primera vez se queda en Pemex. Y de nada sirvió, en apariencia, porque lo que debe la petrolera no se ha reducido ni siquiera con las “inyecciones” de capital proporcionadas por la Secretaría de Hacienda y que presumiblemente servirían para cubrir los vencimientos de empréstitos.

Incluso, hace poco más de un mes, se anunció que Pemex adelantaría el pago de 800 millones de dólares para que la próxima presidenta de México encuentre tranquilidad en los pagos de la empresa y pueda diseñar el programa financiero y de producción.

Para esas mismas fechas, el Banco Mundial confirmó un crédito solicitado por México por mil millones de dólares. Entre lo prestado y lo pagado hay una diferencia de 200 millones de dólares. ¿Dónde están?

Como referencia, hay que señalar que el empresario Alonso Ancira, quien detenido y llegó a un acuerdo para cubrir un monto superior a los 200 millones de dólares en cuatro entregas, hizo la transferencia por 50 millones de dólares a una de las múltiples cuentas de Pemex y de pronto nadie supo dónde fueron a parar los mil millones de pesos.

Como se le quiera mirar, Pemex está en picada.

La falta de mantenimiento le ha costado incendios, explosiones en sus refinerías y plataformas, además de cuantiosas fugas en sus ductos, sin olvidar el huachicol que se mantiene más vivo que un dolor de muelas.

Todo en conjunto se apunta en el renglón de “pérdidas”.

No hay para dónde hacerse y entrar, de lleno, a la defensa de la empresa emblemática de México.

Alguien debe rendir las cuentas y ese alguien debe ser el mismísimo presidente que ya se va.

E-mail: jesusmichelmp@hotmail.com, Facebook Jesus Michel, X @misionpolitica y en Misión, Periodismo sin Regaños martes y jueves de 16 a 17 horas por Radio Cañón en el 760 de amplitud modulada

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