En opinión de Jesús Michel Narváez  
 ¿Retorna confianza de EU?  

Punto de Vista

Por Jesús Michel Narváez

Comprobado: las autoridades de Estados Unidos desvelan que el gobierno del que ¿se fue? redujo la cooperación entre ambos gobiernos.

Un comunicado del Servicio de Investigación (CRS) del Congreso estadounidense señala a mediante un análisis que hizo público, que la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia de México, abre la posibilidad de aumentar la cooperación con EU en materia de seguridad, cuya eficacia hasta ahora, fue puesta en duda por el aumento en las muertes por sobredosis de sustancias ilícitas en la Unión Americana y la alza en la tasa de homicidios en territorio mexicano.

“Durante su gestión como jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Sheinbaum mantuvo la cooperación en inteligencia y seguridad con Estados Unidos, incluso cuando la administración de Andrés Manuel López Obrador, en general redujo la cooperación federal. Este hecho sugiere una posible apertura a la colaboración con Estados Unidos en temas de seguridad”, señala el análisis.

El texto reseña que Sheinbaum, durante campaña, propuso priorizar programas de prevención de adicciones y la creación de grupos de trabajo binacionales para abordar el problema del fentanilo. “Esto indica un enfoque que busca abordar las causas del problema de las drogas, y no solo sus síntomas, a través de la cooperación con Estados Unidos”, añade.

El análisis, que seguramente no tomó mucho tiempo en redactarse, reconoce que el «Marco Bicentenario», que la administración de López Obrador acordó con el gobierno de Joe Biden, en sustitución de la denominada «Iniciativa Mérida», representa un esfuerzo por revitalizar la cooperación en materia de seguridad centrándose en el fentanilo, la trata de personas y el tráfico de armas, aún enfrenta interrogantes sobre su eficacia y alcance.

Y viene el señalamiento que justificaría no haber informado al gobierno de México de la aprehensión, extracción, entrega o traición, de Ismael El Mayo Zambada.

Dice el texto: “Persisten preocupaciones sobre la transparencia, la rendición de cuentas y el respeto de los derechos humanos en el contexto de la creciente participación de las fuerzas de seguridad mexicanas en la lucha contra el crimen organizado. Grupos de derechos humanos y algunos legisladores estadounidenses han expresado su preocupación por el historial de abusos de las fuerzas de seguridad mexicanas y la necesidad de una mayor supervisión”, explica.

Como prueba irrefutable, el dato duro: desde 2019, México ha superado a China como la principal fuente de fentanilo en Estados Unidos, con precursores químicos procedentes en su mayoría de China.

¿Cuándo tomó posesión el que ¿se fue? como presidente de México?

Si los analistas del Congreso de Estados Unidos, que no son “contratados por amiguismo o compadrazgo”, estiman que con la presidenta Sheinbaum podría mejorar -ahora inexistente- cooperación en materia de la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, se trataría una muestra de que el trabajo de reconstrucción de la cooperación de ambas naciones, se deterioró desde 2019 y ahora se ventila que cuando jefa de gobierno de la Ciudad de México, Sheinbaum mantuvo cooperación en inteligencia y seguridad, muy probablemente sin enterar a su mentor, es posible recuperar  parte, no del todo, la confianza que debe haber entre ambas naciones en temas específicos.

La ¿partida? de quien termino su gestión, ventilará muchas de las versiones que han corrido, sobre todo en los últimos meses, cuando El Mayo fue trasladado a Estados Unidos. La relación directa del que ¿se fue? con el criminal, algo nada difícil de comprobar por la actitud asumida en contra del gobierno de Washington por no “informar la operación”.

Es momento, por lo menos se especula, que Estados Unidos no ha enviado un nuevo informe o la ampliación del anterior, explicando cómo ocurrió la captura del criminal por el que la DEA ofrecía 15 millones de dólares por pistas que condujeran a la captura.

La violencia en Sinaloa centrada en Culiacán y 4 municipios más, es atribuida por el que ¿se fue? a la decisión de Estados Unidos. La postura del entonces presidente parecía la de un defensor bien pagado por su cliente, el encarcelado.

Este análisis difundido ayer, sin duda representa dos lecturas: 1.- El expresidente mexicano no se ocupó de conservar la cooperación y, a los criminales les envió abrazos y no balazos y, 2.- Que con la presidenta Sheinbaum hubo cooperación cuando fungió como gobernadora de la capital del país.

No es aventurado sacar conclusiones más allá de las conjeturas.

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