Se complica reubicación del monumento a la madre en Oaxaca

Redacción Oaxaca Político / NVI Noticias.- La oposición de vecinos de la agencia de Santa Rosa Panzacola, Oaxaca, a la reubicación del Monumento a la Madre, el cual bifurca la carretera federal 190 en su acceso a la ciudad de Oaxaca, lo cobraron las autoridades con abandono oficial.

“No nos oponemos a que rehabiliten las áreas verdes, pero que no destruyan, ya no hay otro parque. Las mismas autoridades nos lo encerraron y ahora es poco el acceso que podemos tener”, es la queja que la presidenta de la Colonia Linda Vista, Paula Barrita expresa.

Vicente Vivas recuerda bien que como vecinos han acudido a al menos tres reuniones con autoridades sin que logren la conservación de este monumento que, al igual que el área verde que lo circunda “esté en el abandono, tal parece que lo quieren desaparecer”.

Remodelación

Previo a la conclusión de su administración y para conectar con un paso peatonal las áreas verdes alrededor del Monumento a la Madre con el nuevo Centro Cultural Álvaro Carrillo, el exgobernador Alejandro Murat autorizó la rehabilitación del área que incluyó sembrar plantas endémicas como agaves y cactus.

Sin aviso ni consenso previo con los vecinos, la actual administración retiró los adoquines de los andadores y comenzó con la demolición de la base del monumento a la Madre, lo que en septiembre pasado provocó protestas a la circulación vial.  

Tras la protesta que impidió la circulación en las vialidades aledañas, vecinos lograron acordar con autoridades estatales la suspensión temporal de las obras.

Sólo recuerdos

Arely Ramírez recuerda que en su niñez en este monumento se hacían las festividades en torno al Día de la Madre, además de que era un espacio para jugar fútbol, pasear en bicicleta, correr o caminar.

“Antes había plantas, flores y hasta fútbol se jugaba. Lo hemos tratado de mantener; es necesario que nos dejen este parque porque ahora es sólo para indigentes”, expone.

Las y los vecinos de las colonias aledañas se organizan para que domingo a domingo brinden un tequio, ese trabajo colaborativo no pagado para recoger la basura que se acumula, cortar el pasto o limpiar un poco.

El tequio comienza a las 7:00 horas. Las y los vecinos que tienen voluntad van llegando poco a poco con una escoba, una pala, un pico o cualquier herramienta que ayude a conservar el espacio, aunque ante tanto olvido parece no notarse la diferencia.

Cuarto de bomba

En lo que fue el cuarto de la bomba que llevaba agua a lo que funcionó como una fuente, personas sin hogar improvisaron un lugar dónde dormir.

“Sus oraciones son mis soldados madrecita mía, gracias por la vida k me diste (sic)”, se lee con letras mayúsculas en una de las paredes.

Adoquines, una piedra de gran tamaño, cobijas, ropa vieja, tenis sin par y basura, es parte de lo que se puede encontrar en un pequeño espacio que se improvisó como vivienda, con una sábana colgada en un mecate. A unos pasos la ceniza da cuenta que con adoquines se hizo una fogata.

Los 78 años de vida que tiene Emilia le permiten asociar al Monumento a la Madre con un parque que ya estaba desde que ella llegó a los cinco años a vivir con su familia a la colonia Linda Vista.

“El parque primero tuvo aquí a la Fuente de las 7 regiones”, recuerda al describir una ciudad tan poco poblada que en vez del Centro Cultural Álvaro Carrillo se encontraban los contenedores en los que Petróleos de México almacenaba combustible, antes de trasladarlos a Santa María El Tule.

La fatalidad para esta área verde comenzó después del 2007, cuando se amplió a cuatro carriles la carretera federal 190 que circunda el Cerro del Fortín.

“Para hacer los cuatro carriles al parque lo recortaron muy feo, quitaron el reloj que una agencia de autos colocó en la punta y levantaron una barda perimetral, solicitamos un puente, pero nunca nos hicieron caso”, recuerda.

Otros usos

Incluso, antes de construirse el Mercado Zonal de Santa Rosa, los vecinos recuerdan que este espacio sirvió temporalmente como un espacio de comercio.

Leticia, quien había tenido dificultades para participar en tequios anteriores muestra una cisterna sin tapa que debería estar vacía, pero que almacena algo de agua y piedras.

“Qué tristeza me da ver el parque así por caprichos de otra índole. No han querido ayudar, qué bonito estaría, pero ignoro cuál es la intención de destruir, como vecinos podemos venir a apoyar, pero que hablen, que nos digan cuál es el proyecto que tienen”, pide Leticia.

Ya pasaron más de dos meses y medio desde que las y los vecinos lograron una minuta de acuerdo con autoridades de dependencias como la Secretaría de Infraestructura y Comunicaciones y siguen esperando que presenten el proyecto para este espacio.

Esperan también que respondan a su solicitud de volver a colocar el adoquín de los andadores y reparen la fuente que circunda el Monumento a la Madre.

GPP