Sinaloa enfrenta una escalada de violencia que ha dejado dos personas muertas, seis secuestradas y una docena de vehículos robados en un solo día.
Este alarmante panorama se registró el 15 de noviembre, cuando las autoridades locales confirmaron múltiples incidentes en Culiacán, la capital del estado.
La Fiscalía General del Estado reportó que un homicidio tuvo lugar en la colonia Perisur, mientras que el cuerpo de otra víctima fue encontrado en la Maxipista Culiacán-Mazatlán, a la altura de Laguna de Canachi. Las circunstancias de estos asesinatos aún son inciertas, y las autoridades no han proporcionado más detalles sobre los hechos.
Además, se formalizaron 12 denuncias por robos de vehículos y seis por desapariciones en Culiacán. La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) también recibió reportes sobre la presencia de al menos diez hombres armados en motocicletas que bloquearon calles en la colonia Paseo del Río.
Sin embargo, al llegar la Policía Estatal Preventiva, no encontraron a los sospechosos ni a personas armadas.
Otro incidente inquietante ocurrió en Mazatlán, donde un hombre intentó robar una ambulancia de bomberos. Al no poder hacerlo porque el vehículo no encendió, amenazó al personal diciendo que regresaría para matarlos si la persona lesionada fallecía.
La SSP también confirmó la desaparición de dos menores en la colonia Loma de Rodriguera y el ingreso a un hospital de un hombre con una herida en la cabeza por un golpe con arma de fuego. Este último caso se suma a un patrón preocupante de violencia en Sinaloa.
