Violencia en Sinaloa: Balaceras, bloqueos y una celebración del Grito de Independencia sin fiesta
Mientras la reforma al Poder Judicial acapara la atención nacional, en Sinaloa el caos se ha apoderado de las calles. Desde finales de agosto, las balaceras y bloqueos provocados por dos facciones del Cártel del Pacífico han generado un ambiente de miedo y desesperación entre los ciudadanos, y han llevado a la suspensión de actividades importantes, incluyendo las festividades del Grito de Independencia.
Un estado bajo fuego
La situación en Sinaloa ha empeorado dramáticamente. Desde el 29 de agosto, se han registrado intensos enfrentamientos en la capital, Culiacán. A pesar de los rumores sobre la posible detención de Iván Archivaldo Guzmán Salazar, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, la información oficial no ha confirmado tales hechos. La violencia se ha extendido, involucrando tanto a criminales como a fuerzas de seguridad, con reportes de enfrentamientos entre hombres armados y miembros del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional.
El lunes 9 de septiembre marcó un pico en la violencia. La colonia La Campiña en Culiacán fue escenario de tiroteos y bloqueos, con camiones incendiados y vehículos cruzando las calles a gran velocidad. A pesar de breves periodos de calma, los enfrentamientos han continuado, y la cobertura mediática ha sido escasa.
Desgarradora realidad: víctimas y daños
Hasta el 11 de septiembre, la Fiscalía de Sinaloa reporta al menos nueve muertos y ocho heridos en diversas localidades como Culiacán y Eldorado. Las autoridades también han recibido 14 denuncias por secuestro y 16 por robo de vehículos. Entre las víctimas fatales se encuentra un sargento del Ejército que estaba en servicio en el 94/o Batallón de Infantería.
La fiscal Claudia Zulema Sánchez Kondo informó que se han iniciado ocho investigaciones por homicidio doloso, con seis víctimas identificadas y tres sin identificar.
Rumores y especulaciones
La violencia en Sinaloa ha desatado una ola de especulaciones. Los rumores apuntan a una reorganización dentro del Cártel de Sinaloa tras la captura de figuras clave como Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo”. Algunos expertos sugieren que los enfrentamientos actuales podrían ser parte de una lucha interna por el control del cártel.
Medios y redes sociales comparan estos eventos con los de 2019, cuando la captura de Ovidio Guzmán provocó el denominado “Culiacanazo”. La falta de información oficial ha alimentado aún más la incertidumbre.
Respuestas de las autoridades
El gobernador Rubén Rocha Moya ha intentado calmar la situación desde el inicio de los enfrentamientos, pero sus declaraciones han sido contradictorias. Mientras pedía calma, también confirmaba ataques a militares y bloqueos en distintas zonas de la ciudad. El 9 de septiembre, la violencia obligó a las autoridades a suspender las clases y cancelar las festividades del Grito de Independencia, con la excusa de la necesidad de mantener la seguridad.
Rocha Moya insiste en que el operativo conjunto de los tres niveles de gobierno está funcionando adecuadamente, aunque los residentes y medios locales cuestionan esta afirmación.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha minimizado la situación, acusando a los medios de sensacionalismo y sugiriendo que algunos desean que el país se sumerja en el caos.
¿Qué sigue para Sinaloa?
La violencia en Sinaloa plantea un futuro incierto. Mientras los enfrentamientos continúan y la inseguridad aumenta, la población espera respuestas efectivas de las autoridades. La situación actual no solo ha perturbado la vida diaria de los sinaloenses, sino que ha evidenciado desafíos significativos en la gestión de la seguridad pública en el estado. ¿Cuánto tiempo más durará esta crisis?
