La Cámara de Diputados aprobó la reforma que transfiere el control de la Guardia Nacional (GN) a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), ahora el dictamen será enviado al Senado.
Con 362 votos a favor y 133 en contra en lo general, la iniciativa avanzó gracias al respaldo de Morena, el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM). Ahora, el dictamen pasará al Senado para su evaluación y posible ratificación.
Durante la discusión en lo particular, la propuesta obtuvo 353 votos a favor y 126 en contra, con la oposición firme del PRI, PAN y Movimiento Ciudadano.
A lo largo del debate, se presentaron 433 reservas, de las cuales solo una fue aceptada: la de la diputada de Morena, Merary Villegas, quien propuso eliminar los términos «de origen» y «marino» para describir al personal de la GN. Así, la redacción final establece que la Guardia estará integrada por “personal militar con formación policial”.
Un nuevo mando para la Guardia Nacional
El dictamen aprobado no solo incorpora la GN a la Sedena, sino que también establece que su titular será un general de División en activo, designado directamente por la presidenta de la República a partir de una propuesta de la Defensa Nacional.
Este cuerpo de seguridad pública tendrá como misión principal la implementación de la Estrategia Nacional de Seguridad Pública, con la Sedena asumiendo el control total de los recursos financieros y operativos que antes pertenecían a la extinta Policía Federal.
La reforma además habilita al Ejecutivo Federal para recurrir a las fuerzas armadas en labores de seguridad pública cuando la ley lo permita, marcando un paso más hacia la consolidación de la estrategia de militarización de la seguridad en México.