La violencia que se recrudeció esta semana en Pantelhó, donde las autodefensas de El Machete y pistoleros del grupo de los Herrera mantienen una lucha por el control de este municipio chiapaneco amenazan con impedir las próximas elecciones.
Desde el lunes 15 hasta el jueves 18, han ocurrido constantes balaceras, paralizando todas las actividades de la comunidad, incluyendo las clases en las escuelas, por lo que integrantes de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano, tuvieron que ingresar para rescatar a unos 100 maestros que estaban atrapados en medio de los enfrentamientos.
Una caravana de 45 vehículos con decenas de personas que habitan en la cabecera municipal de Pantelhó, incluyendo a los maestros, fueron escoltados por los militares para poder salir del poblado cuyas entradas fueron bloqueadas por los grupos armados en pugna.
De acuerdo al reporte de Gabriela Coutiño, corresponsal de la revista Proceso, la situación en Pantelhó se agravó en días pasados tras el regreso de Rubén Herrera, uno de los integrantes de la familia que durante dos décadas han mantenido un control caciquil en este municipio.
“Estuvo transitando en una camioneta guinda; fue cuando mataron en la cabecera al dueño de una tienda de nombre César. Después emboscaron a otra persona y luego secuestraron a los choferes de tres camiones de volteo. Fue entonces cuando las autodefensas y el pueblo decidieron que tenían que defenderse y presionar al gobierno”, señaló un testigo a la corresponsal.
Ante la violencia que hay en el municipio, los representantes de 86 comunidades han señalado que no aceptarán que se realicen elecciones o cualquier actividad promovida por partidos políticos y optarán por un concejo municipal.
En un comunicado que enviaron el 24 de marzo al Congreso estatal y al Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC), los representantes de las comunidades rechazaron la elección del 2 de junio, pues no hay condiciones de seguridad, y se pronunciaron por la definición de un Concejo por usos y costumbres en una asamblea a mano alzada.
Desde el 25 de mayo de 2018, el Frayba de la diócesis de San Cristóbal señaló la existencia de grupos civiles armados en Pantelhó y de cómo los partidos políticos dividían y confrontaban a las comunidades indígenas. Hace dos años hizo crisis el cacicazgo en este municipio, cuando la población se rebeló y formó el grupo de autodefensa El Machete, para oponerse a la violencia de los Herrera.
El Machete apareció el 7 de junio de 2021 en la cabecera municipal de Pantelhó para rebelarse en contra un cacicazgo encabezado por el entonces alcalde perredista, Ricardo Trujillo Morales, a quien acusaron de tener sicarios a su servicio.
En aquella ocasión, el grupo mencionó que desde hace 20 años comenzó su sufrimiento, cuando en 2002, el señor Austreberto Herrera Abarca “se quiso autonombrar para ser juez municipal de Pantelhó”. Denunciaron que Herrera fue quien “le abrió las puertas al crimen organizado” y a los narcotraficantes y así comenzó a matar a quienes se oponen a sus actividades.
Al tomar el control del municipio en 2021, el grupo de El Machete retuvo en el parque central de esa población y secuestró a 21 personas que estaban ligadas con los Herrera, quienes desde hace cuatro años están desaparecidas. Esto desencadenó las confrontaciones entre los dos grupos, donde se han registrado bloqueos carreteros, quemas de viviendas, secuestros y homicidios. RDM
