El futuro de Mexicana de Aviación, la aerolínea estatal administrada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), pende de un hilo luego de que se revelara una demanda millonaria en su contra. La compañía SAT Aero Holdings, anteriormente conocida como Petrus Aero Holdings, ha interpuesto una demanda en un tribunal federal de Nueva York por la suma de 838.5 millones de dólares, más otros 2.4 millones en costos, alegando incumplimiento de contrato y daños y perjuicios.
La demanda, que ha causado revuelo en los círculos financieros y gubernamentales, podría llevar a la aerolínea al borde de la quiebra, según advierten expertos del sector aéreo. Fernando Gómez, analista del sector, señaló que la falta de recursos financieros para enfrentar este litigio prolongado podría desencadenar graves problemas para las finanzas públicas del país.
«En Estados Unidos hay un incumplimiento de contrato, esto lo puedes contrademandar, pueden irse a juicios, a meses, pero no hay recursos para financiar un juicio de esta magnitud», explicó Gómez, enfatizando la gravedad de la situación.
La aerolínea, que ha enfrentado diversos obstáculos desde su adquisición por parte del Gobierno Federal, se encuentra ahora en una encrucijada, con operaciones complicadas y una demanda millonaria que podría poner fin a sus actividades. A pesar de los esfuerzos por reactivar la compañía, incluyendo la contratación de personal y la adquisición de aeronaves, la demanda representa un nuevo golpe para la viabilidad financiera de Mexicana de Aviación.
El analista también destacó las deficiencias en la gestión de la aerolínea por parte del gobierno, señalando que la adquisición de la marca y las aeronaves se llevó a cabo sin un plan claro y sin rescatar la compañía original ni sus empleados.
Ante la posibilidad de quiebra, Gómez subrayó que esto representaría una carga adicional para el presupuesto del erario público y lamentó la falta de previsiones y estudios de mercado para justificar las acciones tomadas por el gobierno en relación con la aerolínea.
En cuanto a los extrabajadores, Gómez expresó su preocupación por las condiciones en las que se encuentran, con pagos parciales y por debajo de lo que les correspondería como liquidación, reflejando la urgencia de la empresa por encontrar una solución viable ante la falta de garantías financieras.
Con información de LaOtraOpinión
