Redacción Mx Político.- Los propietarios de automóviles eléctricos noruegos tienen una palabra para la forma en que se sienten cuando miran con nerviosismo los indicadores de la batería mientras conducen en un clima bajo cero: «rekkevideangst» o «ansiedad de autonomía».
El propietario de Tesla, Philip Benassi, lo ha experimentado en los fríos días de invierno, pero al igual que otros noruegos, ha aprendido a sobrellevarlo.
Con temperaturas que a menudo caen bajo cero, un terreno accidentado y largos tramos de carreteras remotas, Noruega puede no parecer el lugar más ideal para conducir un automóvil eléctrico, cuya batería se agota más rápido en climas fríos.
Sin embargo, el país es el campeón mundial indiscutible en lo que respecta a los vehículos de cero emisiones.
Un récord de cuatro de cada cinco autos nuevos vendidos en Noruega el año pasado fueron eléctricos, en un importante país productor de petróleo que apunta a poner fin a la venta de autos nuevos de combustibles fósiles para 2025, una década antes de la prohibición planificada por la Unión Europea.
En comparación, los automóviles eléctricos representaron el 12,1 por ciento de las ventas de automóviles nuevos en la UE en 2022, frente al 9,1 por ciento del año anterior, según datos publicados el miércoles por la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles.
Benassi dio el paso en 2018.
En su reluciente Tesla S blanco, el vendedor de 38 años de una empresa de cosméticos recorre entre 20 000 y 25 000 kilómetros (12 400 y 15 500 millas) al año.
Como la mayoría de los nuevos propietarios de vehículos eléctricos, tuvo momentos de pánico al principio cuando vio que el indicador de la batería caía rápidamente, con la posibilidad de que cayera a cero en una carretera rural desierta.
«No conocía el coche lo suficiente. Pero después de todos estos años, tengo una idea bastante clara de cuántos kilovatios necesita y sé que varía mucho dependiendo de si el coche ha pasado la noche al aire libre o en un garaje», dijo a la AFP.
El automóvil usa mucha más batería cuando está estacionado afuera a temperaturas que pueden llegar a menos 15 grados Celsius (cinco grados Fahrenheit), dijo Benassi.
“Se tarda bastante en volver al consumo normal”, añadió.
En la estación fría, la cantidad de autonomía que pierden los coches eléctricos depende del modelo y de lo baja que sea la temperatura.
«Pero se aplican las siguientes reglas generales: una helada de alrededor de menos 10 °C reducirá el rango operativo en alrededor de un tercio en comparación con el clima de verano, y una severa (menos 20 °C o más) hasta la mitad», dijo la consultora finlandesa Vesa Linja. -aho.
«Al almacenar el automóvil en un garaje cálido, este fenómeno se puede mitigar un poco», agregó.
