Redacción, Noticias MXPolítico.-Desde protestas en Buenos Aires hasta huelgas de hambre en Madrid, venezolanos en todo el mundo enfrentan dificultades para registrarse y ejercer su derecho al voto en las próximas elecciones presidenciales, donde Nicolás Maduro busca su continuidad en el poder.
En numerosos consulados en América Latina y Europa, ciudadanos y activistas reportan obstáculos que van desde la falta de maquinaria para el registro hasta la ignorancia deliberada por parte de funcionarios diplomáticos.
Según Jesús Delgado de la ONG Transparencia Electoral, estas trabas son sistemáticas y podrían ser resultado de la falta de directrices claras por parte del Consejo Nacional Electoral de Venezuela.
Las autoridades venezolanas atribuyen los retrasos y dificultades para enviar maquinaria a las sanciones internacionales. Mientras tanto, la ONU estima que cerca de ocho millones de venezolanos han migrado desde 2014, huyendo de una profunda crisis económica y política en su país.
Aunque unos 5,2 millones de venezolanos en el exterior deben actualizar su registro o inscribirse por primera vez para votar, el padrón electoral apenas cuenta con 107.000 registrados en todo el mundo. La ruptura de relaciones diplomáticas con Estados Unidos en 2019 ha dejado a unos 40.000 venezolanos en ese país sin la posibilidad de votar en estas elecciones.
Mientras tanto, en Colombia, el país con la mayor cantidad de venezolanos, el registro de votantes se abrió con retraso, generando preocupación entre activistas que temen que el consulado no reconozca el Estatuto Temporal de Protección como residencia legal.
Las protestas en Buenos Aires y Madrid reflejan la frustración de la diáspora venezolana ante las dificultades para ejercer su derecho al voto. En Argentina, donde hay alrededor de 220.000 venezolanos, solo unos 2.200 están en el registro electoral, según estimaciones de activistas.
En Madrid, Lorena Lima llevó a cabo una huelga de hambre para presionar por la apertura del registro, un gesto que fue replicado por Luis Magallanes en Quito, quienes exigían poder ejercer su derecho a votar en las elecciones venezolanas del 28 de julio.
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